Los permisos de Conselleria están sujetos a condiciones como un estudio arqueológico y la conservación de fachadas
El equipo de Gobierno de Castelló ha dado luz verde al proyecto de rehabilitación integral de la Casa de Cultura, Antonio Maura, para su transformación en un Centro de Envejecimiento Activo. La Conselleria de Cultura ha autorizado la intervención siempre que se cumplan condiciones como que se realice un estudio arqueológico completo tras el derribo y antes de la construcción, la conservación de fachadas y el salón de actos y que se mantengan los criterios estéticos de un edificio catalogado como Bien de Interés Local.
Esperanza Molina/ Castellón Información
La Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Castelló ha dado luz verde al proyecto de rehabilitación integral de la Casa de la Cultura (antiguo Colegio de la Consolación), en la calle Antonio Maura, para la creación de un Centro de Envejecimiento Activo.
El presupuesto estimado por los técnicos asciende a 3,8 millones de euros, financiados al 50% por los planes Edusi, de fondos europeos, y podrá salir en breve a licitación abierta para comenzar su ejecución.
La Casa de Cultura de Castelló es un edificio muy singular en Castelló. Se construyó en la década de los años 30 del siglo XX sobre un proyecto de Vicente Traver Tomás para albergar el primitivo colegio de la Consolación.
Con los años, pasaría a ser de titularidad municipal y se destinaría a diferentes usos, fundamentalmente de carácter cultural y social.
La planta del edificio tiene unas dimensiones de 725,74 metros cuadrados, con forma de T, porque se edificó tomando como base tres edificios diferentes que se articularon en torno a su patio central.
De esta forma, la Casa de Cultura de Castellón da a tres calles: Isabel Ferrer, Antonio Maura y Enmedio. Los estilos arquitectónicos de cada una de las fachadas son completamente diferentes. Por ejemplo, la que recae sobre Isabel Ferrer aprovechaba la existencia de una casa señorial valenciana de los siglos XVI-XVI, mientras que la fachada de la calle Enmedio responde más a los edificios de viviendas de principios del siglo XX.
El resultado de aquel primitivo proyecto se tradujo en un inmueble de tres plantas con una superficie construida de 2.351,56 metros cuadrados, cuya entrada principal se abre en calle Antonio Maura, pero con corredores a diferentes alturas cuyos desniveles se salvaban con rampas y escaleras.
La capilla del antiguo colegio de la Consolación, sin duda una de las partes más emblemáticas del inmueble, recaía sobre Isabel Ferrer, y se transformó posteriormente en salón de actos o conferencias.
La casa de la Cultura de Castelló ha formado parte de la vida de varias generaciones. Primero como colegio y después como centro cultural, el salón de actos ha albergado reuniones, conferencias, asambleas, actuaciones, selecciones de la Festa de la Rosa… El inmueble de Antonio Maura ha ejercido como biblioteca, archivo, sede del Ateneo, Aulas de Tercera edad, y ha sido sede de los ensayos de la Banda de música o de la Junta de Fiestas.
Su situación actual está en un alto grado de deterioro motivado por la antigüedad del edificio y la falta de un mantenimiento eficaz. Pero aún así, se trata de un edificio catalogado como Bien de Interés Local que consta de una protección parcial por parte de la Dirección General de Patrimonio.
De esta forma, cuando el Ayuntamiento se planteó su rehabilitación, se planteó una finalidad: conseguir un Centro de Envejecimiento Activo destinado, sobre todo a la gente mayor. Pero, para poder llevarlo a cabo hubo de sortear dos exigencias fundamentales: la financiación, estimada según la memoria presenta a los colectivos de tercera edad en septiembre de 2019, en 4,5 millones de euros; y las autorizaciones necesarias por parte de Patrimonio y la Conselleria de Cultura.
Con respecto a la financiación, la cifra recogida en el anteproyecto rebaja la cantidad inicial de 4,5 millones de euros a 3,8 millones de euros. Pero la buena noticia, es que el proyecto fue aprobado por el Ministerio y consiguió entrar en los Edusi de los fondos europeos.
En este sentido, el Ayuntamiento financiará el 50% y Europa se hará cargo del 50% restante.
Conselleria autoriza el proyecto con condiciones
En lo que concierne a los permisos, Ayuntamiento cuenta también con el visto bueno de Patrimonio y la autorización de la Conselleria, aunque deberá cumplir con una serie de condiciones.
La protección parcial del inmueble obliga a proteger las fachadas y algunos puntos del edificio. Conselleria exigía también el proyecto previo y además obliga a consultar las soluciones arquitectónicas que se adopten en la remodelación.
También protege las fachadas y los materiales que se utilicen en las mismas. Y finalmente y esto es importante, obligaba a realizar un estudio arqueológico previo, y a desarrollar un estudio arqueológico en profundidad cuando se realice la demolición y antes de que comiencen las obras.
Proyecto arquitectónico de rehabilitación
El proyecto de rehabilitación contempla: respetar las fachadas originales, y la parte del edificio que alberga el salón de actos, antigua Capilla de la Consolación, que recae a Isabel Ferrer, y ocupa dos alturas, si bien permite reforzar su estructura.
De esta forma, deberán de apuntalarse las fachadas, proteger el salón de actos y conferencias y proceder posteriormente a la demolición de la zona interior del inmueble.
Deberá realizarse entonces un estudio arqueológico en profundidad antes de proceder a la edificación.
La solución arquitectónica mantiene la volumetría del inmueble, la profundidad y la disposición y dimensiones del patio central, que se articula como conector principal de los tres sectores, además de dotarlo de luz natural. Se contemplan también otros patios interiores, así como la eliminación de desniveles y una articulación de corredores cortos, para facilitar la circulación en las distintas plantas. Y por supuesto, las mejoras de accesibilidad, y la adecuación del nuevo centro en cuanto a la evacuación de emergencia.
El objetivo, es convertirlo en un inmueble único, cien por cien accesible. Se incluyen además aseos adaptados en todas las dependencias para personas con movilidad reducida que incorporan una litera-cambiador y todos los elementos necesarios para personas con una ostomía y aquellas que requieren tratamientos inyectables.
Se mantendrá el acceso principal por Antonio Maura, y se respetarán las otras dos fachadas, si bien, en la parte que da a la calle Enmedio se creará una fachada paralela interior, para poder acoplar todos los espacios y plantas a la misma altura.
La planta baja acogerá un punto de orientación e información, la cafetería, un salón de actos para cien personas (donde está ahora, en la antigua capilla del Colegio, que es una de las zonas a conservar), una sala de exposiciones y zona ‘housing’, (palabra con la que se identifican espacios que proporcionan cierta autonomía y donde los usuarios pueden disponer de centros de datos compartidos con ordenador y navegador propio) La primera planta desplegará un área de actividades lúdicas, una sala de lectura y otra de estudio y dos aulas polivalentes.
El gimnasio, una sala de actividad física, el servicio de peluquería, fisioterapia y podología, junto a talleres polivalentes y una zona de estimulación sensorial se ubicarán en la segunda planta. La tercera estará reservada a despachos, sala de reuniones y el área de dirección y administración.
Otro de los atractivos del nuevo centro es la recuperación de la azotea, donde se implementarán terrazas y zonas de descanso y un huerto urbano.
El periodo de ejecución una vez licitado el proyecto y adjudicadas las obras es de 18 meses.
