También han acudido hoy a Morella el conseller Rafa Climent y el vicepresidente de la Diputación, Vicent Sales
La vicepresidenta y consellera de Igualdad y Políticas Inclusivas, Mónica Oltra, ha destacado junto al conseller de Economía Sostenible, Sectores Productivos, Comercio y Trabajo, Rafa Climent, que la singularidad y el simbolismo del Sexenni de Morella logran transportar a todos los visitantes "a las raíces" del pueblo valenciano. En esta octava jornada del novenario han acompañado al alcalde de Morella, Rhamsés Ripollés, ya la corporación municipal además de Oltra y Climent, el vicepresidente de la Diputación de Castellón, Vicent Sales, el Secretario Autonómico de Comunicación, José María Vidal, y el Director Territorial de Presidencia, Adolf Sanmartín.
Durante su visita a la celebración del 54º Sexenni, Oltra ha añadido además que esta fiesta aúna aspectos de la tradición valenciana "como el religioso, el cultural o el de las danzas", y ha reconocido que pese a ser "una enamorada de la villa desde hace muchos años" esta es "la primera vez" que tiene la oportunidad de asistir a un Sexenni.
"Estoy empapándome y haciendo una inmersión en esta fiesta, compartiéndola con el pueblo de Morella y también con los miles de visitantes que está recibiendo esta semana la ciudad", ha proseguido la vicepresidenta.
Por su parte, el conseller de Economía Sostenible ha expresado que la celebración morellana es "una de las tradiciones más importantes" que existen en la Comunitat, y ha reivindicado que se ponga en valor porque "marca claramente qué hemos sido, qué somos y qué seremos los valencianos y valencianas en el futuro".
Climent ha explicado que rememorar la historia valenciana "es también poner en valor a su gente", y ha aseverado que eso los habitantes de Morella "lo hacen continuamente y se acentúa todavía más cada seis años con el Sexenni".
En la jornada de hoy ha sido el Gremio de Artes y Oficios el que ha protagonizado el penúltimo Retaule del 54 Sexenni. La fiesta llega a sus últimos días, no sin antes otorgar protagonismo a uno de los colectivos organizadores más tradicionales y que no falta a su cita de seis en seis años. En este gremio se agrupan los distintos oficios de la ciudad, como los representados en sus correspondientes danzas.
El gremio de Artes y Oficios, uno de los más antiguos, ofrece dos danzas protagonizadas por niños y niñas. La danza de Teixidors es un homenaje a la tradición textil de esta tierra, los niños, elegantemente ataviados y tocados con sombreros de fieltro, danzan alrededor de un palo de cinta de colores, tejiendo y deshaciendo sus cintas de colores.
La danza de Arts i Oficis representan viejos oficios de zapatero, sastre, impresor, herrero, sillas, carpintero, obrero, entre otros. La gracia infantil danza con círculos de flores los días más importantes, y el resto, llevan instrumentos de los oficios que representan. La colorista indumentaria de los vestidos y las coronas con flores que llevan en las cabezas es otro punto de atracción. Además de estas dos danzas, el Gremio de Artes y Oficios aporta otras dos representaciones en el Retaule. Se tratan de las Miraverges, representadas por las niñas que han tomado la comunión en el presente año, y las Santetes.