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El Ayuntamiento de Almassora ha contratado un estudio previo a la redacción del Plan Especial de la Vila, un trabajo que permitirá radiografiar el estado actual del casco antiguo, sus carencias y el proyecto de futuro que reclama la ciudadanía. La elaboración de este estudio cuenta con un presupuesto de 15.950 euros más IVA y un plazo de cinco meses que ha iniciado la cuenta atrás con la recopilación de información municipal y que se abrirá a la participación ciudadana en septiembre.
Los objetivos del estudio de la Vila pasan por proponer líneas de actuación para su revitalización, entre las que destacan la puesta en valor del casco antiguo, la mejora de la accesibilidad y conectividad de su trama urbana y conexión con el resto del municipio, la preservación y conservación del patrimonio histórico, el análisis de las condiciones de edificabilidad y usos existentes al tiempo que se mejora el conjunto de espacios libres y dotacionales y las estrategias de reactivación económica, social y cultural.
Según ha indicado la concejala de Urbanismo, Carmina Martinavarro, “se trata de un análisis global que aprovechará el trabajo previo realizado en materia de topografía pero que será mucho más amplio al incluirse, por primera vez, las necesidades que detecten los vecinos y el estado actual en materia de infraestructuras y servicios”.
En esta línea se manifiesta también el gabinete encargado del estudio, que ha comenzado a recopilar información a nivel arqueológico e histórico y que continuará con la búsqueda de fotografías antiguas y la radiografía de servicios urbanos e infraestructuras hasta el próximo mes de septiembre, cuando arrancará el proceso abierto de participación vecinal. “Se hace imprescindible contar con la colaboración ciudadana para realizar esta labor de diagnóstico y de búsqueda de soluciones”, señala esta parte.
En este sentido, durante la segunda quincena de septiembre y el mes de octubre tendrán lugar las entrevistas con propietarios, asociaciones, técnicos y políticos. “El proyecto tiene que ser lo más abierto posible y no reducirse a un grupo de residentes porque el futuro de la Vila es responsabilidad de todos”, ha declarado Martinavarro. No en vano, este documento marcará la rehabilitación y revitalización del casco antiguo anunciadas por el equipo de gobierno.
Iluminación led
A este proyecto se sumará el cambio de iluminación a partir del próximo otoño. La Vila cambiará las bombillas actuales por luces tipo led para reducir el consumo energético. Esta iniciativa supone la renovación de 200 focos de lámparas de vapor de sodio por otras de bajo consumo, una inversión cuantificada en 150.000 euros.
