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El equipo de gobierno de Vila-real ha dado un paso más adelante en la búsqueda de una solución al problema derivado de los aprovechamientos urbanísticos “del anterior gobierno del Partido Popular, que han lastrado y lastran el futuro de nuestra ciudad”. Así lo ha afirmado el concejal de Territorio, Emilio Obiol, quien ha anunciado que se está trabajando en un documento que presenta “la única solución seria, posible y realista al desastre de gestión del PP” y que “permitirá taponar la sangría y el rosario de empastres que han dejado como herencia a nuestra ciudad”, apunta.
Obiol, que ha recordado que el pasado día 22 se realizó una jornada de debate para tratar este tema “con gran éxito de convocatoria”, a la que asistieron profesionales, empresarios, agentes implicados y propietarios a quienes “se informó con transparencia y les se escuchó para mejorar”, ha asegurado que el siguiente paso es “poner el documento en manos de la Conselleria de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del Territorio”, algo que se realizará “de manera inminente”. La tramitación contempla, posteriormente, el retorno del informe al Ayuntamiento, que deberá realizar su aprobación provisional, para su remisión a la comisión territorial de Urbanismo, que dará el visto bueno definitivo.
“No podemos dar plazos, pero garantizamos que, teniendo en cuenta la prisa que tenemos, vamos a hacer que todo discurra con la mayor brevedad”, explica el edil, quien destaca que “somos los más interesados en contar con el documento en firme para evitar los efectos de las sentencias que pueden seguir llegando a destrozarnos el presente y el futuro” y asegura que “es una iniciativa valiente para evitar más problemas a la ciudad”.
Una situación que comienza, según Obiol, con la “irresponsabilidad del PP en la gestión urbanística, que ha dejado alrededor de 700.000 metros cuadrados de techo para colocar en aprovechamientos, con un riesgo de 231 millones de euros, a lo que se añade su propuesta de Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), que incluso la propia Conselleria del PP echó atrás, porque era irreal, irresponsable y premeditada para hacer una política territorial de hechos consumados”. Así, recuerda que “este Plan General prácticamente duplicaba los millones de metros cuadrados de suelo industrial, cuando los existentes todavía no estaban colmatados, lo que demuestra que ni siquiera esta propuesta hubiera sido válida para solucionar sus propios empastres”.
“Un PGOU debe hacerse pensando en el bienestar de toda la ciudadanía y no en solucionar, simplemente, los problemas que afectan a unos pocos”, señala. Por ello, destaca la responsabilidad y la transparencia con la que está trabajando el equipo de gobierno para dar luz a esta cuestión y buscar una solución que “salve” a Vila-real y ofrezca soluciones a los problemas de los barrios, además de volver a prestigiar al urbanismo. “Era muy fácil obtener terrenos a coste cero y el que venga después que cierre la puerta, pero son los vecinos quienes están pagando esta manera de gestionar y nosotros quienes hemos tenido que venir a limpiar el local después de la fiesta”.
Entre las actuaciones que el equipo de gobierno ha realizado, además de pagar las sentencias que han ido llegando, destacan la conclusión de tres PAI residenciales y tres más de suelo industrial, que “todavía podrían incrementarse”. “El nuestro es un urbanismo responsable que aquellos que han perdido la credibilidad jamás podrían hacer”, concluye.
