Rafa Cerdá. Abogado.
Enero y su famosa cuesta: llegados a este punto del recién estrenado 2017, el calendario echa humo ante los múltiples gastos que los sufridos contribuyentes deben afrontar. Las Navidades implican siempre gastos (y mucho más si hay tiernos infantes por medio, los Reyes Magos y Papa Noel no perdonan) en regalos y festejos varios, que comienzan a pagarse a inicios de este gélido mes. Enero es fatídico también para los autónomos; la liquidación trimestral del IVA y demás impuestos recuerda que el pequeño empresario paga las facturas de toda la sociedad, contribuyendo al sostenimiento de la sanidad, educación, pensiones y un largo listado de prestaciones públicas, mientras que al colectivo exprimido por excelencia tiene que sudar sangre con tal de asegurar el cobro de sus pírricos honorarios.
Menos mal que las rebajas suponen un pequeño alivio a las mermadas arcas de las familias, durante estas semanas, la tan temida ‘cuesta de enero’ se ve paliada por chollos, oportunidades y gangas de todo tipo y condición, ofertados por comercios y grandes almacenes. Esa misma adquisición que en Navidad fue adquirida a precio de oro, dos semanas después ha visto ‘rebajado’ su valor con un significativo porcentaje...
¿Y qué quieren que les diga de la clase política? Visto el mercado que se ha convertido esta España nuestra, no me extraña que los principales dirigentes se hayan lanzado a ofrecerse como una verdadera ganga para la ciudadanía. Miren el ejemplo del Partido Socialista, los potenciales candidatos a sustituir a Pedro Sánchez, se publicitan como si de un ‘chollazo’ se trataran. Patxi López prometiendo todo lo prometible; Susana Díaz un pasito para adelante, otro para atrás, no acaba de lanzar su candidatura pero al mejor estilo de las campañas del Corte Inglés siempre se hace presente, asegurando que nadie mejor que ella aúna calidad con buen precio. El resto de potenciales competidores, un engaño...
En Podemos un poco más de lo mismo, se quieren un montón Pablo Iglesias e Íñigo Errejón, pero lo suyo es un cariño de lejos. De verse muy lejos el uno al otro vamos. Y a ser posible, saliendo por la puerta para no volver. Pero en la familia ‘podemita’ las rebajas no se llevan, son propias del sistema capitalista y de además de origen burgués. Mola más los intercambios y el trueque, una suerte de economía colaborativa, donde se ofertan rifirrafes vía twiter a cambio de controversia a través de Facebook, o sutiles recaditos del partidario ‘errejonista’ de turno retornables por una acusación del portavoz ‘pablista’ oportuno.
Y por lo que respecta al Partido Popular y Ciudadanos, más que rebajas, como muy mucho alguna ofertita, un pequeño descuento y pare usted de contar. Visto el jaleo en el que se encuentra el PSOE, el ascendente grado de conflicto interno que vive Podemos, y la amenaza de unas nuevas elecciones en caso de bloqueo político por las pírrica mayoría parlamentaria del PP en el Congreso; lo mejor es guardar la mercancía, y prietas las filas.
A nivel internacional, nos ha llegado el gran chollo del otro lado del charco: Donald Trump se estrena como Presidente de los Estados Unidos, presentándose como un producto genuinamente norteamericano, si bien sospecho que debajo del laqueado flequillo del señor Presidente se puede leer un ‘Made in Taiwan’ bien sospechoso...
Visto lo visto, mejor ahorrar y no adquirir nada. Menudas rebajas tan paupérrimas, si hasta aquellas vendedoras de los antiguos mercados tenían más que ofrecer; ¿recuerdan la famosa frase ‘me los quitan de las manos’? ¿A qué dirigente político se imagina repitiendo estas misma palabras?...yo a más de uno, bueno, en concreto, a una (andaluza para más señas)... pero eso ya es otra historia.
