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El Ayuntamiento de la Vall d'Uixó y la Universitat Politècnica de València (UPV) han formalizado un convenio de colaboración de 8.500 euros para impulsar un proyecto piloto de control de robos en el campo y vertidos incontrolados en el medio rural con aeronaves no tripuladas (drones). La alcaldesa, Tania Baños, y el profesor titular del departamento de Ingeniería Cartográfica de la UPV, Israel Quintanilla, han firmado el documento en presencia del concejal de Agricultura, Fernando Daròs, y el concejal de Policía, Javier Ferreres.
El periodo de implementación del servicio es de siete meses, por lo que estará activo antes de que finalice el año. Durante este tiempo el Ayuntamiento se constituirá como operadora aeronáutica para que se le permita legalmente realizar operaciones de vuelo con drones, se formará a dos policías locales como pilotos y se establecerá la metodología para que estas aeronaves se integren dentro de las actividades municipales.
Baños, ha afirmado que esta iniciativa “nos sitúa como una ciudad puntera, moderna y que se adapta al siglo XXI”. “Queremos estar a la vanguardia en innovación, conocimiento e investigación, de la mano de la universidad, que es quien tiene a las personas que estudian, investigan, analizan e implantan nuevas soluciones a los problemas que tenemos los municipios”, ha destacado. El concejal ha señalado que este acuerdo “permite aplicar tecnología puntera y de futuro para hacer frente a dos de los problemas que sufrimos, como son los robos en el campo y los vertidos incontrolados”. De esta manera se llevará a cabo “una vigilancia más precisa y eficaz, porque abarca más terreno y mejorará la seguridad y la imagen de nuestro término municipal”.
Para ello se realizarán vuelos fotogramétricos con cámaras para tomar imágenes aéreas de las zonas donde se producen los vertidos, videovigilancia y actualizaciones cartográficas. Este proyecto se nutre del trabajo ya realizado gracias a Life Ecocitric, gracias al que el Ayuntamiento dispone de una base cartográfica de todas las parcelas agrícolas, geolocalizadas y con datos asociados de variedad, extensión y propietario. Esto redunda en una mayor eficiencia “porque sabemos qué parcelas están en producción en cada momento según la época de recolección cada variedad y donde se localizan”, por lo que “podemos saber en qué momento existe riesgo de robo y en qué zonas centrarnos”, ha explicado Baños.
Este proyecto que se implementará en la Vall d'Uixó forma parte de un ambicioso programa piloto liderado por la UPV y en el que participan los ayuntamientos de Algemesí (agricultura de precisión) y Xàtiva (robos en chalets) y la Agencia Valenciana de Seguridad y Respuesta a las Emergencias. Cada experiencia se extrapolará y aplicará en el resto de municipios una vez se evalúe su funcionamiento.
