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viernes, 22 de noviembre de 2024 | Última actualización: 22:28

El Congreso de los Diputados, Cámara del insulto

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Federico Arnau. Comerciante jubilado.

El Congreso de los Diputados es la cámara donde se discuten las leyes y la gobernabilidad de nuestro país que es España, por los representantes elegidos de los votos que hemos depositado en las urnas, por lo tanto es el Congreso el espacio donde se deben defender los interese de los españoles, que somos los verdaderos jefes de esta nación, aunque declinemos nuestra responsabilidad en unas personas que hemos elegido para salvaguardar nuestros intereses.

Cuando los españoles queremos circo, nos vamos al circo, por desgracia ahora no podemos ver labor de los domadores en fieras, como leones o elefantes o cualquier animal que como los hombres, tienen que trabajar para comer, pero en vez de trabajo se ve como maltrato, y tenemos que aguantar, no sé cómo definir a estos interesados.

Porque es el único espacio a expensas de los parques naturales donde se pueden ver este tipo de animales que los niños, no todos tienen la posibilidad de que sus padres puedan llevarlos a un Zoo,  igual que muchos no saben lo que es un cerdo o gallina o pato si no los llevan a las granjas productoras.

Si queremos ir al teatro vamos al teatro eligiendo la obra que nos guste, drama, comedia, revista, musical, zarzuela u ópera.

Pero el Congreso de los Diputados no es el escenario para personajes como Pablo Iglesias puesto que la falta de educación y como profesor no da ningún valor positivo a nuestra juventud, todo lo contrario, no se puede permitir palabras que dirija al Presidente del Gobierno como ‘me la suda’, ‘me la repampinfla’, ‘me la chupa’, además del indecoro de vestimenta y aseo personal.

Pero no solo es Pablo si no también el personajillo impresentable de Rufián, que se permite insultar y llamar ‘ladrón nos veremos en el infierno’, una sarta de insultos impropios de un diputado, pero es que él como el otro y todos sus compinches dicen esas cosas para hacerse notar y que se hable de ellos, pero en el fondo son unos cobardes, tan cobardes que esto lo dicen porque se amparan en el aforamiento por ser diputados, en otro caso supongo que se andarían con más cuidado.

Pero no solo son cobardes estos personajes, también lo es Alberto Garzón, secretario de IU, que entre afiliados y simpatizantes en 2016 tenía 72.000 españoles, no se pronunció en la entrevista de La Sexta sobre el golpe de Estado de Maduro en Venezuela, echando balones fuera, otro cobarde que sigue chupando de nuestros impuestos.

Y visto la bajeza, la incultura, la vulgaridad en que se ha convertido esta cámara representativa de todos los españoles. ¿Cómo un ciudadano normal no recrimina a sus políticos en cualquier situación? Pues es lógico por la falta de respeto que los políticos al permitir esto se convierten en cómplices de esta forma de hacer política, y que se traduce en una falta de respeto una falta de confianza y una estafa al ciudadano.

En este caso puesto que toda esta gente proviene del Partido Comunista de España llámese IU, Podemos, Ahora en Comú, Castello en Moviment, Mareas o infinidad de nombres, todos son Partido Comunista de España, esos que adoran a Carrillo y que la memoria histórica no recuerdan lo que hizo este personaje en Paracuellos del Jarama y luego huir con el rabo entre las piernas a Francia.

Lo pasado es solo historia, pero cuando hagamos historia difundamos la verdad no solo la interesada, la franquista, la republicana, la comunista, toda cada una la que le toque, pero no falseemos la verdad, y los políticos deben ser honestos y no se puede hacer como el PSOE  o Ciudadanos, arropar mirando a su propio interés y no el del resto de los ciudadanos apoyar y hacer pactos con todas las coaliciones del Partido Comunista de España, y la bandera de España es la roja y gualda, y se si quiera cambiar el escudo de esa bandera pongamos el Águila de los Reyes Católicos.

Fuera aforamientos, fuera privilegios.