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El concejal popular, Carlos Feliu, revela que algo está fallando en la gestión educativa del bipartito cuando de las 13 propuestas aprobadas, que serán financiadas a cargo de los 1,6 millones de euros de los Presupuestos Participativos-, el 30% hacen referencia a mejoras en los colegios.
Feliu: "26 de cada 100 euros de los Presupuestos Participativos irán a reparar colegios, cuando el Ayuntamiento ya dispone de una partida de medio millón de euros para ello”.
Resulta muy significativo que entre las propuestas vecinales de los Presupuestos Participativos, los vecinos hayan priorizado la adecuación y drenaje de patios, reformas en los aseos infantiles de colegios o la señalización de caminos escolares seguros.
Tratándose de necesidades en los centros educativos de primaria, "es responsabilidad del concejal de Educación, Enric Porcar, estar informado y dotar de soluciones estas demandas, sin necesidad de tener que esperar a que salgan a la luz a través de las propuestas ciudadanas".
Puesto que el Presupuesto Municipal prevé partidas específicas para atender las necesidades de los colegios, “no era necesario esperarse a los Presupuestos Participativos”.
Los populares urgen al bipartito devolver el protagonismo a las Asociaciones Vecinales en los Presupuestos Participativos. El nuevo sistema de votación las ha ninguneado.
Feliu: “Han acabado con el tejido asociativo de la ciudad que siempre ha sido un referente, porque es capaz de detectar necesidades de todos los distritos”.
El sistema de votación impuesto por el bipartito ha generado desigualdades entre distritos. Ni la Marjalería, ni el Grao -con una población cercana a los 20.000 habitantes-, recibirán ni un solo euro de 1.600.000 euros de los Presupuestos Participativos.
