R.M/Castellón Información
Hace ya un tiempo que Portell de Morella, un pequeño pueblo de la comarca de Els Ports está obcecado en salvar la única escuela con la que cuenta la localidad, de apenas 264 habitantes según el INE.
Pero, después de muchos días y semanas pensando como hacerlo, al consistorio y a los vecinos se les ha ocurrido una oferta de lo más irrechazable: dar trabajo y un alquiler por 50 euros al mes para familias con hijos en edad escolar que quieran iniciar así una nueva vida. Todo, con el objetivo de salvar un colegio que ya estaba en el punto de mira. La iniciativa no ha podido tener mejor respuesta: 20 familias de toda la geografía española ya han optado por mudarse a Portell. Un aspecto que también favorecerá a la repoblación del municipio.
De toda España
Este martes, varias de ellas, provenientes de Galicia, Valencia, Madrid, Cantabria, pero también de otros puntos de Castellón, han visitado el municipio para conocer en primera personas donde podría ubicarse su nuevo hogar. A nada más y nada menos que 1.000 metros de altitud sobre el mar.
Las entrevistas con las familias las realiza el Consejo Escolar y el consistorio y empezaron el mismo día de las visitas. El alcalde, Álvaro Ferrer (PP) se mostró muy ilusionado: “Se va por muy buen camino”, aseguró. “Hay muchas que cumplen el perfil y va a ser difícil seleccionar”.
De momento el pueblo puede ofertar siete empleos y dispone de tres viviendas. Ferrer señala que para que para que esta solución sea duradera en el tiempo "sería necesario que al menos dos familias quieran quedarse".
Solo cuatro alumnos
El aulario de Portell pertenece al Colegio Rural Agrupado (CRA) Celumbres, junto a los de Cinctorres y Castellfort. En él estudian siete alumnos entre niños y niñas. Para el próximo curso, la ratio tan solo ocupaba cuatro estudiantes, por lo que se precisaba de una movilización, aunque el centro de momento podía seguir abierto.
El consistorio se ha lanzado a la búsqueda de ayudas para buscar más puestos de trabajo. Para ello han contactado con la Diputación y con la Generalitat. Con ello se buscarían ofertas de trabajo temporal que al final acabaran siendo a largo plazo para así asentar como puros vecinos a los nuevos habitantes de la localidad.
