Y solicita que se extremen los controles en personas y productos de riesgo de los países afectados y las medidas de bioseguridad de las granjas
Castellón Información
La Unió de Llauradors i Ramaders ha pedido a la Administración, tras declararse el pasado viernes en Bélgica un foco de Peste Porcina Africana (PPA), que extreme los controles en personas y productos de riesgo de los países afectados, las medidas de bioseguridad de las granjas y el transporte, así como que plantee la prohibición de importaciones de cerdos hasta tener controlados los focos de la enfermedad.
La Unió pidió en el mes de marzo que se prohibieran las importaciones de jabalíes debido a los graves problemas de contaminación de peste porcina africana detectados en poblaciones de este animal en varios países del este de Europa. Solicita ahora también una modificación de la norma en referencia a los lechones ya que considera que, tras la detección de la enfermedad en jabalíes en Bélgica, estarían plenamente justificadas las máximas restricciones en la importación de cerdos vivos.
La organización recuerda que la PPA es una enfermedad vírica que tiene graves consecuencias para los cerdos, no afecta a las personas, pero tiene un elevado potencial de difusión de forma extensiva y rápida, como se ha visto con los brotes en jabalíes los últimos meses en China, en la Europa del Este y ahora Bélgica y Bulgaria.
Para La Unió, la apuesta del sector debe ser la de mantener los niveles de calidad sanitaria del ganado porcino para asegurar los buenos rendimientos de las explotaciones de la Comunitat Valenciana. Esta calidad se ha conseguido mediante el bienestar animal, el buen manejo en las granjas y con las máximas medidas de bioseguridad.
En la línea de asegurar la calidad sanitaria, según la organización, habría que recuperar el equilibrio entre las granjas de madres y de engorde, ya que este equilibrio evitaba la importación de lechones de fuera del país. Esta situación estaría cambiando y durante el primer semestre se observa ya un fuerte incremento de importaciones de lechones holandeses, lo que puede poner en peligro el bienestar del sector porcino del país.