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jueves, 21 de noviembre de 2024 | Última actualización: 22:28

El Museo de Bellas Artes de Castellón acoge las piezas más características de la colección artística de Télefonica

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Incluye 57 obras entre pintura, escultura y obra en papel de Picasso, Gris, Magritte, Delvaux, Chillida, Tàpies, entre otros artistas

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La exposición Destacados. Colección Telefónica, con una selección de 57 obras entre pintura, escultura y obra en papel –las piezas más significativas e icónicas de la colección–, podrá verse desde mañana y hasta el 28 de abril en el Museo de Bellas Artes de Castellón.

La importancia de las obras reside no solo por la corriente artística que representan, sino también en la trascendencia de su autor y el interés que generan en el ámbito cultural figuras de la talla de Pablo Picasso, Juan Gris, René Magritte, Paul Delvaux, Eduardo Chillida, Antoni Tàpies, etc. Así, las piezas elegidas para esta exposición permiten trazar una breve panorámica de algunos de los capítulos más interesantes ocurridos en la historia del arte de dentro y fuera de nuestras fronteras a lo largo del siglo XX. La mayoría de estas piezas se han visto otras veces, pero nunca de manera colectiva.

 Han inaugurado la muestra esta tarde el Molt Honorable president de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig; el director general de Telefónica en Catalunya, Comunitat Valenciana, Illes Balears y Región de Murcia, Kim Faura; la alcaldesa de Castellón, Amparo Marco; el director del Museo de Bellas Artes de Castellón, Ferrán Olucha, y la responsable de Colecciones e Itinerancias de la Fundación Telefónica, Laura Fernández Orgaz.

 Ecos de las vanguardias, el signo y la forma

La muestra se divide en dos ámbitos diferenciados: “Ecos de las vanguardias” y “El signo y la forma”. El primer ámbito representa, a través de una selección de obras adquiridas en las últimas décadas, algunos de los movimientos más importantes de las vanguardias de principios del siglo XX: desde el cubismo de Juan Gris, o Louis Marcoussis, la obra bien representada de Luis Fernández, el surrealismo de René Magritte y Paul Delvaux, pasando por la desbordante creatividad de Pablo Picasso con tres obras de distintas técnicas y etapas.

Después de la Segunda Guerra Mundial, el arte pasa por un estado de malestar y se desarrolla el informalismo, un estilo complejo y diverso que se extenderá por Europa y Estados Unidos, y en el que la materia, el gesto, la ausencia de forma o lo abstracto generará numerosas e interesantes variantes. Así, en la sección “El signo y la forma”, el visitante se sumergirá de manera monográfica en la obra de tres grandes del arte español más internacional y que se hicieron eco de este estilo: Tàpies, Chillida y Saura.

Second Canvas: las obras, al milímetro

La exposición irá acompañada de la app Second Canvas Colección Telefónica, una nueva manera de conocer digitalmente los fondos artísticos de la colección. Con esta aplicación, algunas obras pueden verse a una resolución veinte veces superior a la que se consigue con una cámara profesional. La app también permite descubrir las historias que hay detrás de cada obra a través de sus detalles.

 La Colección Telefónica: ejemplo de coleccionismo corporativo

La Colección Telefónica se compone de un conjunto de más de 1.000 obras entre pintura, escultura, fotografía y obra en papel. La creación de este fondo se inicia en los años 80 con la intención de promover el reconocimiento de una serie de artistas españoles poco representados en los museos estatales. Se adquirieron entonces obras excepcionales de Juan Gris, Antoni Tàpies, Eduardo Chillida, Pablo Picasso y Luis Fernández y a lo largo de las dos décadas siguientes, y con objetivos muy distintos al inicial, la Colección se fue ampliando y abriendo a otros caminos artísticos.

Fruto de esta evolución, la Colección Telefónica ha sido calificada como colección de colecciones, al poder agruparse en varios bloques temáticos y por contener artistas magníficamente bien representados tanto en cantidad como en la calidad de sus obras. Con presencia nacional e internacional de autores más y menos consagrados, el contenido de la colección es ecléctico y diverso en cuanto a disciplinas y corrientes estéticas se refiere.

No obstante, aunque nunca tuvo una vocación enciclopédica, observada en su conjunto permite testimoniar algunos de los movimientos más significativos del siglo XX: desde el cubismo (representado con un valioso conjunto de más de 40 piezas) al surrealismo, pasando por el informalismo, la abstracción o las diferentes tendencias de la pintura figurativa, sin olvidar el fondo de fotografía contemporánea, que reúne a algunos de los autores más relevantes de esta disciplina.