El ayuntamiento de Onda ha dado por finalizado el contrato con la empresa que prestaba la asistencia y dirección técnica en materia de ingeniería y urbanismo, y que supuso un gasto de 1.763.000 euros en el periodo comprendido entre 2007 y 2011. El contrato se firmó 2009 con una duración de cuatro años y todavía estaba en vigor, pero el equipo de gobierno ha resuelto el acuerdo y ha incautado la fianza por incumplimiento del servicio por parte del contratista.
El actual concejal de Urbanismo, Carlos Prades, explica que “desde hace años teníamos el contrato con la misma empresa para la redacción de proyectos de obras, con un límite máximo de 274.000 euros. Sin embargo, en 2008 se le pagaron facturas por 690.838,79 euros y en 2009 por valor de 356.000 euros. Incumplieron la Ley en todos los contratos, una vez consumidos los 274.000 euros. Todos ellos, según la Ley de Contratos del Sector Público, deberían haber cumplido una serie de requisitos para asegurar la concurrencia pública y que cualquier empresa pudiera optar. Algo que en Onda no ha sucedido y que hubiera ahorrado mucho dinero a los ondenses”, ha explicado.
Durante la anterior legislatura, según fuentes del ayuntamiento de Onda, se pagaron varios proyectos que al final no se han realizado se iban a realizar las obras. Así Carlos Prades recuerda que en el ayuntamiento hay “documentos muy caros que ahora no tienen ninguna utilidad y el dinero que entonces se despilfarró serviría ahora para mejorar la ciudad y los servicios a los ondenses”.
El edil ha citado como ejemplos los proyectos de ejecución de obras como el párking del Raval (75.644 euros en el proyecto), el cubrimiento del multiusos (85.743,68 euros), la redacción de documento urbanístico para el desarrollo de Ingeniero Echegaray (185.519,79 euros), la redacción de documentos para desarrollar el sector La Cosa (202.771,31 euros) e incluso una memoria valorada para una estación intermodal (6.149,17 euros) o el estudio para un aparcamieto subterráneo en la plaza Ibn Al Abbar (46.400 euros) que nunca se construyó.
Carlos Prades recuerda que este dinero gastado por el anterior alcalde en estos seis documentos “ya es superior al total que el Ayuntamiento ahora ha invertido en la dirección, obras y estudios arqueológicos de la plaza del Raval”.
