La antigua vivienda del párroco de Benicàssim, ahora llamada Sala Abadía, acoge una exposición sobre las 25 ediciones del festival
Castellón Información
La parroquia de Benicàssim acoge a los fibers con distintas actividades. Una de las iniciativas, es la exposición que duerme entre las paredes de la Sala Abadía, antigua vivienda del párroco de la localidad costera. La exposición ofrece imágenes sobre las 25 ediciones del Festival Internacional de Benicàssim (FIB), que este año abre sus puertas del 18 al 21 de julio. El segundo día oficial del evento, la parroquia de Santo Tomás de Villanueva organiza por quinto año consecutivo una vigilia de evangelización y adoración desde las diez de la noche hasta la una de la madrugada.
La parroquia se ha preparado y ha colgado ante la fachada del templo principal una pancarta que invita a la vigila. "Es una manera de fortalecer la presencia y ser más incisivo en el anuncio.", explica el párroco, Luis Oliver, y continua: "A veces Dios interpela a través de estos medios". El lunes ya empezaban las actividades del FIB como antesala a los días fuertes de conciertos.
La comunidad Siervos de Cristo Vivo se ha encargado de la organización de la velada. Se han organizado en equipos y uno de ellos, invitará a los transeúntes a entrar en el templo, donde el Santísimo está expuesto. Mientras, otro equipo animará la oración con cantos. La gente podrá confiar una intención de oración y depositarla en unos cestos ante al altar. El año pasado participaron más de 400 personas.
Además de la vigilia del viernes, cada tarde está expuesto el Santísimo en la capilla de las hermanas de la Sagrada Familia de Nazaret (c/Tirant lo Blanc 10). Luis Oliver asegura que cada año, el domingo participan en las Eucaristías jóvenes que han venido para el FIB . Además valora que no dejan el precepto dominical. En definitiva, se trata por diferentes medios de "salir para hacerse encontradizo", explica evocando la consigna del Papa Francisco.
