Los programas convocados por la Vicepresidencia y Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas se han realizado durante los meses de julio y agosto
Castellón Información
Las estancias vacacionales de la Generalitat han gozado con la participación de más de 1.700 personas con diversidad funcional. Los programas convocados cada año por la Vicepresidencia y Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas se han realizado durante los meses de julio y agosto. Además, Igualdad destina cerca de un millón de euros a entidades sin ánimo de lucro para organizar estas estancias a lo largo de todo el año, sin contar también las organizadas por el Instituto Valenciano de Atención Social-Sanitaria (IVASS).
Por un lado, y con un presupuesto para este año de 993.542 euros, la Conselleria financia la realización, promoción y desarrollo de estos programas vacacionales a lo largo de todo el año. Durante los meses de julio y agosto 28 entidades de la Comunitat Valenciana han realizado 66 estancias por un importe de 616.593 euros en las que han participado 1.432 personas con diversidad funcional.
El objetivo de estos programas es proporcionar actividades de ocio y tiempo libre a este colectivo. Por otra parte, el programa también busca promover su normalización e integración en la comunidad, así como favorecer su participación social y potenciar su autonomía personal.
Además de este programa de la Conselleria, el IVASS también organiza todos los años este tipo de estancias durante el mes de agosto para los usuarios con diversidad funcional intelectual de sus centros.
Estas personas son atendidas en todo momento por un equipo de profesionales y voluntariado, además de un servicio médico-sanitario 24 horas al día para dar respuesta a cualquier incidencia que pueda darse en el transcurso de las estancias.
Durante el mes de agosto 300 personas con diversidad funcional intelectual y enfermedad mental crónica de los centros y viviendas tuteladas del IVASS han disfrutado de unos días de ocio y tiempo libre en estas estancias.
Las estancias se desarrollan en instalaciones hoteleras, campamentos de verano o albergues juveniles, que cuentan con las instalaciones adecuadas para acoger a estas personas y los equipos profesionalizados y de apoyo debidamente preparados para ofrecer una atención personal e inclusiva a los usuarios y las usuarias.
