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domingo, 24 de noviembre de 2024 | Última actualización: 18:10

Pedro Sánchez: “El 10N no nos basta con ganar, tenemos que conseguir una mayoría para gobernar”

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El líder del PSOE promete financiación autonómica e ilegalizar la Fundación de Franco

Pedro Sánchez volvió a Castellón en un mitin que se celebró en el recinto de la Pérgola, donde pidió el voto para el PSOE el 10N porque “no nos basta con ganar, tenemos que conseguir una mayoría para gobernar”. Cerca de un millar de personas en este encuentro, en el que Sánchez prometió la financiación autonómica para la Comunitat y arrancó aplausos cuando habló de memoria histórica y de ilegalizar la fundación Franco.

Esperanza Molina/ Castellón Información

El mitin de Pedro Sánchez en Castellón, para pedir el voto para el PSOE el próximo domingo, no consiguió la asistencia de público que tuvo hace unos meses en el Palau de la Festa.

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Es cierto que el aforo de la Pérgola era limitado. La parte superior estaba vetada por razones de seguridad, pero aún así, un recuento aproximado se situaría sobre los 800 asistentes para escuchar al presidente en funciones y líder del PSOE. Cerca de mil, por aquello de la generosidad. En cualquier caso, algunos harían la comparación entre la capacidad de Abascal para llenar recintos y la del Pedro Sánchez que vuelve a liderar la lista socialista.

Pero allí estaban los suyos, los representantes políticos en las instituciones de Castellón, Diputación, Generalitat Valenciana, y muchos de sus seguidores más cercanos, dispuestos a escuchar lo que querían oír y a aplaudir a su líder y arroparlo en estas nuevas elecciones generales.

Estaban también los ‘históricos’, los más fieles, y una gran mayoría con una media de edad que no cumplirá ya los 50. ¿Era bueno o no? Posiblemente esta descripción sería calificada como la perversa descripción de un medio no progresista, como en algún momento dijo Pedro Sánchez ante las críticas recibidas en los últimos meses por parte de los medios de comunicación.

Con todo, Sánchez fue recibido con aplausos, con gritos de ‘presidente’ y con una conmoción general donde no faltaron besos y abrazos.

Abrió el mitin la alcaldesa de Castellón, Amparo Marco, que volvió a prometer a Sánchez la fidelidad de Castellón, el respaldo de ‘su’ capital de la Plana en una provincia que ya tiene Diputación socialista, después de 24 años, y donde los socialistas pintan de rojo la Comunitat después de 32 años.

Dio el relevo al secretario provincial del PSOE, Ernest Blanch, que se dejó la piel para pedir el voto, para respaldar la tarea realizada por el PSOE, porque: “El que fan Pedro Sánchez i Ximo Puig és construir un país progresista”.

Como no podía ser de otra manera, Franco volvió a aparecer en los discursos, como uno de los logros socialistas. Lo hizo Susana Ros, cuando se refirió a la exhumación del Valle de los Caídos, y cuando mencionó que las heridas cerradas son aquellas en las que los familiares puedan reconocer y enterrar a las víctimas de la represión franquista.

Lo haría después Pedro Sánchez, y levantaba de su asiento a los asistentes.

Susana Ros, que encabeza la candidatura al Congreso, centró su discurso en temas tan sensibles como la muerte diga, la represión franquista, los ataques recibidos por parte del PP, y la igualdad de género, “contra la violencia de género, tolerancia cero”. Para prometer después un gobierno de progreso.

En su intervención, el presidente de la Generalitat Valenciana, y secretario general de la Comunitat Valenciana del PSOE, Ximo Puig, volvió a incidir en estos términos y en los logros de su Gobierno.

Pidió el voto para Pedro Sánchez, pero, sobre todo, enfatizó la necesidad de votar el próximo 10N. Y es que tanto Puig como sus compañeros del PSOE centraron gran parte del mitin en la necesidad de romper los augurios del incremento de la abstención.

Y finalmente, dio la palabra a Pedro Sánchez, que fue recibido con entusiasmo, con el ondeo de banderas del PSOE, y con la algarabía de su público.

Sánchez quería agradar, levantar al público de sus asientos, sentirse arropado… y para ello, lo primero que hizo fue manifestar el agradable sentimiento de acogida que sentía cada vez que pisaba Castellón, porque como había manifestado Ximo Puig, “es el presidente del Gobierno que más ha visitado la provincia y la Comunitat Valenciana”.

En un tono entre jocoso y divertido, comenzó por señalar que tenía dos noticias, una buena y otra mala. Y aquí se recreó en la sintonía que despertaba en los asistentes, para presumir de la victoria que espera conseguir el próximo domingo, y en la decepción que sufrirá la derecha con los resultados.

Se defendió de los titulares que han sacudido los medios de comunicación sobre sus ‘incumplimientos’ en sus promesas, calificando a esos medios de comunicación de signo poco progresista.

Llegado aquí, prometió la financiación justa tan solicitada por la Comunitat Valenciana, tema en el que se dirigió personalmente a Amparo Marco.

Enumeró sus ‘promesas’ y sus ‘logros’, y culpó de los proyectos que no había podido llevar a cabo al ‘bloqueo’ de los otros partidos. Razón por la cual señaló: “El 10N no nos basta con ganar, tenemos que conseguir una mayoría para poder gobernar”, con los proyectos que el PSOE lleva en su cartera.

Pero hubo un momento especial en todo su discurso, que fue cuando recordó a los asistentes la represión franquista, su gran proyecto, conseguido, de sacar a Franco del Valle de los Caídos, y cuando prometió que cuando llegue de nuevo a la Moncloa, con la mayoría suficiente, ilegalizará la Fundación Franco.

Habló de igualdad, y de violencia de género, y achacó a la derecha una doble vara de medir. De cambio climático, y sacó de nuevo la amenaza de las tres derechas, y afirmó que los otros partidos políticos que se presentan a las elecciones carecen de proyecto político, porque solo el PSOE puede defender y sacar adelante un Gobierno Progresista.

Tal como había empezado se despidió de sus seguidores, desde el estrado, con un gesto de victoria al que se unieron también Amparo Marco, Susana Ros, Ernest Blanch, o Artemi Rallo, y salió de la Pérgola entre abrazos, besos y saludos.