Los agentes se manifestaron y dieron la espalda al concejal, que dijo, que la siniestralidad de la marjal es mínima
Broncas en el pleno de febrero que, ausente de contenidos por falta de presupuestos, se centró en los conflictos de Policía Local, Marjaleria, avenida de Lidón y Penyeta Roja. Temas que sacó a relucir la oposición en una sala que fue tomada por los agentes locales y donde no faltaron también otros vecinos de las zonas perjudicadas. Braina manifestó a en el pleno que la siniestralidad en la Marjalería es mínima y que el conflicto de la Policía es una guerra sindical, porque realmente, "no pasa nada"
Esperanza Molina/ Castellón Información
El pleno del mes de febrero llegaba escaso de contenido. La ausencia de presupuestos, la retirada de mociones a última hora y el veto a las declaraciones institucionales en la Junta de Portavoces, abocaban a una sesión flojita.
Pero la guinda del pastel llegaba vestida con chalecos amarillos. Eran los agentes de la Policía Local de Castelló, movilizados por tres de los cuatro sindicatos: CCOO, SPPLB y CSIF, que volvieron a llenar la parte pública del salón de plenos para reivindicar su situación. Solo UGT y sus representados estaban ausentes, entre otras cosas, porque el concejal de Policía ya ha negociado con ellos una solución a la falta de agentes en la calle.
No faltaron tampoco los representantes de la Marjalería o vecinos de la avenida de Lidón, e incluso, de Els Mestrets.
Sala con público, espectáculo seguro. Y así fue.
Los sindicatos de policía piden la mediación de la alcaldesa
Poco antes de comenzar la sesión, los representantes sindicales de los tres sindicatos convocantes de la concentración, solicitaban a la alcaldesa de Castelló, Amparo Marco, una entrevista . La razón que esgrimían no tenía secretos. Dicen que no son capaces de negociar con Omar Braina, porque ni les escucha, ni se reúne, ni atiende sus demandas. Y además, se encuentran más que escocidos por el acuerdo unilateral de Braina con UGT.
Sin pena ni juicio pasaron la mayor parte e los puntos de despacho ordinario. No había donde rascar. Se aprobó la urgencia del despacho extraordinario y comenzó el baile.
Presupuestos participativos
La moción del PP para solicitar la ejecución de los presupuestos participativos, algunos de los cuales llevan en el tintero desde 2016 incomodaba al equipo de Gobierno.
Y no es para menos, ya que desde que se instituyó esta figura todos los gobiernos han presumido de lo lindo de escuchar a sus vecinos y transforman en logro propio las necesidades de los barrios.
Sin embargo, las cosas ahora no están tan claras. Hay proyectos participativos que son una verdadera quimera y otros no se acaban de ejecutar nunca. Parte de la culpa, señalaba la oposición, es del cambio de sistema de consulta. Si antes se negociaba con las juntas de distrito y las asociaciones de vecinos, ahora el método es completamente diferente. Ahora, para solicitar estos presupuestos, hay que tener ordenador, aclararse con la tecnología, proponer y movilizar a quienes tienen ordenador y tecnología para que lo voten. En resumen, la participación real se ha traducido en 1,6% de la población. Esta nueva fórmula de participación, decían, llegó con trampa. Como el equipo de Gobierno estaba convencido de que las juntas de distrito y las asociaciones de vecinos barrían hacia la derecha, ¿qué mejor que utilizar herramientas diferentes donde fueran otros afines los que decidan la participación?
Se sumó a la explicación Luciano Ferrer, de VOX, y Ciudadanos dejó su intervención para después de la votación como explicación de voto.
Por parte del equipo de Gobierno, Francesc Mezquita no podía hacer otra cosa sino defender el sistema que su propio grupo impuso en la legislatura anterior. Y como no había demasiada defensa posible, se tiró al ataque, tachó de anticuados a los grupos de la oposición, los acusó de opacos, y de no reconocer el nuevo modelo de ciudad que mira hacia el futuro.
La moción se rechazó con los votos de PSOE, Compromís y Ciudadanos.
En su intervención posterior, Vicente Vidal de Ciudadanos, habló de la falta de voluntad del equipo de Gobierno para hacer partícipe a los ciudadanos y dudó que este año hubiera presupuestos participativos cuando, de momento, no hay presentado ni los presupuestos del 2020.
Más presencia policial en la Marjalería
La segunda moción, presentada también por el PP, recogía la denuncia expresada en la sesión anterior por los vecinos de la Marjalería para incrementar la presencia de Policía local en la zona.
La moción les venía como un guante para también mostrar su apoyo a los agentes que se manifestaban en el pleno.
La alcaldesa estaba nerviosa.
La portavoz del Grupo Municipal Popular, Begoña Carrasco, comenzó su intervención felicitando la valentía de los agentes por haberse manifestado a pesar de las amenazas recibidas.
La alcaldesa no la dejó seguir ¿Qué amenazas?
Fuera de si, Amparo Marco indicó que los agentes tenían derecho a manifestarse, pero la concejal popular no lo tenía para hablar de amenazas salvo que las justificara por escrito y antes de que acabara la sesión.
El belén que se sucedió solo puede seguirse con toda justicia observando el vídeo de lo que fue el encontronazo.
Si una, la alcaldesa, alzaba la voz; la otra, portavoz de la oposición, también; y si Marco perdía nervios y estribos, Carrasco también respondió a la provocación con la misma chulería.
Los agentes aplaudieron a Carrasco en algún momento, fueron amonestados por la alcaldesa, y finalmente, la altanería de una y otra cedió a la necesidad de imponer normalidad y dar continuidad al pleno.
Por fin, dueña de su tiempo, Begoña Carrasco puso de manifiesto la falta de recursos y de personal de la Policía Local, la falta de vigilancia y los robos en la Marjalería. La portavoz del PP defendió la justicia de los incrementos laborales solicitados por los policías, pero indicó que era imposible disponer de dinero si los concejales del equipo de Gobierno se habían aumentado el sueldo un 50%, y gastaban otro tanto con su número de asesores.
Salió a responderle Omar Braina, concejal de Seguridad, y nada más abrir la boca, los agentes de Policía concentrados en el salón de plenos se levantaron y abandonaron la sala, dándole la espalda.
En la primera parte de su intervención, Braina habló de números y estadísticas, para llegar a la conclusión de que el número de incidencias que se producen en la Marjalería es mínimo, apenas un 10% de las asistencias de la Policía Local.
“Aunque estos datos les parezcan significativos, no lo son. Desde el punto de vista del número de servicios que se realizan, se puede extraer que durante los dos meses analizados se ha realizado un solo servicio cada 18 horas de vigilancia en la Marjalería. O lo que es lo mismo, un solo servicio cada dos turnos de trabajo de policías. Esta es la tónica general en la zona. Este dato refleja la seguridad que existe en la zona de la Marjalería en términos objetivos. No obstante, y tal y como dije en mi respuesta a la pregunta ciudadana que se realizó en el pleno pasado, la intención del equipo de gobierno es la de que, una vez finalicen los procesos selectivos que están en marcha y los programados, pretendemos incrementar la presencia policial en la subsede del distrito marítimo, que es la que cubre la zona de la Marjalería.”
Carrasco le contestó con las quejas y denuncias de los vecinos de la Marjalería, que son los que sufren los robos y la inseguridad. Y, finalmente, en el turno de réplica, Omar, ya fue a lo político para culpar de todos los males al Partido Popular, por no haber previsto tres lustros antes que se iba a aprobar una ley de jubilación anticipada que está generando ahora una pérdida de personal importante.
De nuevo votaron a favor PP, Ciudadanos y Vox, y una vez más se tumbó la moción con los votos del tripartito.
En explicación de voto, Luciano Ferrer de Vox, también pidió más Policía Local y Marín-Buck dio su apoyo a los agentes que se habían concentrado.
Por si acaso las cosas no habían quedado claras, intervino la alcaldesa, que utilizó su derecho a la palabra para hacer política de su partido y acusación al PP.
Apoyo al pequeño comercio de Castellón
La tercera moción, que también fue rechazada por el tripartito, fue defendida por María España del Partido Popular, que pedía más apoyo para el pequeño comercio, de mayor accesibilidad al centro, así como la creación de una mesa de trabajo para trabajar en un proyecto común para relanzar la economía local.
Se utilizó también esta moción, para reprochar a la alcaldesa el cierre de las avenidas de entrada a la ciudad. La del Tram, en Paseo Ribalta, (cuyas obras están más que avanzadas y se centran ya en la nueva parada de autobús); y la pretendida remodelación de la avenida de Lidón, que tiene todos sus vecinos con las uñas fuera.
En su discurso, España señaló, que la política de hechos consumados del equipo de Gobierno está ‘matando al Gobierno de la ciudad’. Si la gente de la provincia no puede llegar al centro para hacer sus compras, es lógico que se desvíe a la periferia donde se concentran grandes superficies y supermercados.
El socialista, David Donate, manifestó que el equipo de Gobierno no compartía los anuncios de que el comercio se muere, ni creía que fuera bueno señalarlo así. Es cierto, dijo, que han cambiado los hábitos de compra y que se han modificado otros usos. Por eso, indicó, se ha encargado un Plan de Acción Comercial y, y mientras tanto, se intentan activar medidas. Por lo demás, habló de los presupuestos de este año y de las partidas que tienen pensado invertir.
Ruegos y Preguntas
En Ruegos y Preguntas, Ciudadanos pidió responsabilidades por la defectuosa ‘recogida de las algas del temporal gloria’, y explicaciones por el tema de las tascas y las mediciones realizadas en 2017.
Begoña Carrasco, del PP salió con ganas de devolvérsela a Marco. Si la alcaldesa le había solicitado al principio que hiciera constar por escrito quien le había indicado que los agentes de la Policía local habían sido amenazados para no hacerlo, ahora la portavoz de los populares volvía sobre el tema: “No es posible responderle por escrito con tan poco tiempo y en esta sesión, y además, no estamos obligados a revelar nuestras fuentes.”
Amparo Marco, ya mucho más relajada, accedió a lo primero y no quiso entrar en nueva disputa pese a que Carrasco le recordó a la ahora alcaldesa, que cuando estaba en la oposición, ella hacía lo propio porque “se lo había contado un pajarito”.
Carrasco cuestionó el cierre de Penyeta Roja, que dijo, atenta contra la tutela de los menores que se van a trasladar a centro Verge de Lledó
La portavoz del PP volvió a afear a la alcaldesa por el proyecto de avenida de Lidón, que dijo, no se ha consultado con los vecinos de la zona afectada. Un proyecto que se ha presentado para su financiación en fondos europeos, valorado económicamente y con fechas de ejecución, contra el que se han recogido más de 1.500 firmas en tan solo unos días. “Los vecinos se enteraron por los medios de comunicación”. Y añadió: “ustedes todo por el pueblo, pero sin el pueblo”.
Le respondió Jorge Ribes, quien afirmó que no había un proyecto sino una memoria valorada.
Y como no podía ser menos, terció la alcaldesa al final, para rebatir a Carrasco, porque es una memoria y no un proyecto, porque está pendiente de aprobación, y porque sería entonces, cuando, según las reglas de este proyecto, se consensuaría con los vecinos. En cuanto a Penyeta Roja, indicó, como alcaldesa defendería a la ciudad pero confiaba en el buen hacer de instituciones como Diputación y Generalitat.
Reivindicaciones de la Policía Local
Los agentes de Policía local convocados por CCOO, CSIF y SPPLB han justificado su manifestación en base a que:
1- Porque se nos aprobó sin réplica un cuadrante deficitario, en algunos casos con 85 horas. Esto nos afecta a todos.
2-Porque queremos que el Sr. Concejal convoque y siente definitivamente a todas las fuerzas sindicales para negociar sobre las propuestas que se aportaron desde el principio.
3- Porque así lo ha decidido la gente en las asambleas convocadas, después de valorar la situación y todos los detalles de lo ocurrido en estos tres meses.
4-Porque es un derecho y representamos casi al 70% de los PLCS, entre las tres fuerzas sindicales que no estamos conformes con el cuadrante aprobado.
5-Porque se están negociando los cuadrantes, no la carrera profesional ni el convenio, como algunos están mezclando a propósito para dar por buenas algunas cosas.
6-Porque queremos que se nos preste la atención que merecemos, solucionar este problema, para poder seguir con el convenio, con la carrera horizontal y otros asuntos que nos afectan y mucho.
Braina: Esto es una guerra sindical, realmente no pasa nada
Por su parte, el concejal de Seguridad, Omar Braina, señalaba al final de la sesión, que si faltan policías locales o la plantilla es escasa, es por culpa del PP, que en su momento no fue previsor con las jubilaciones (la ley de jubilaciones anticipadas se aprobó hace dos años).
Destacó que con la plantilla actual hay personal de sobra para hacer frente a las necesidades de la ciudad y es falso que Castelló se encuentre n una situación de inseguridad.
Manifestó que ya ha negociado un convenio con UGT, que él considera sindicato mayoritario, para hacer frente a algunas situaciones con los cuadrantes del personal.
Y señaló que la protesta de los otros sindicatos responde a una guerra sindical, y a un regateo de pequeños detalles, por los que quieren demostrar su valía ante los agentes a los que representan. Para finalizar, según Braina, realmente no pasa nada.
