“Los sanitarios son unos verdaderos héroes y La gente ha respondido con una responsabilidad y un compromiso espectacular”
Esperanza Molina/ Castellón Información
El senador por Castelló, Alberto Fabra, ex presidente de la Generalitat Valenciana y ex alcalde de la capital de la Plana, se recupera en casa tras pasar la fase más intensa del Covid-19.
Apenas han pasado dos semanas desde que abandonó el hospital, pero hoy, por fin, se encontraba con fuerzas para atender a los medios de comunicación, que se han estado preocupando por él durante todos los días que los que estuvo ingresado en el hospital.
Como todo, con la que está cayendo, la conversación ha sido telefónica. Primero a las radios, que se veían ‘apretadas’ por el horario, y luego a los otros medios de comunicación que queríamos hablar con él.
“No se si voy a tener fuerzas suficientes”, comentaba a sus allegados antes de comenzar las conexiones. Y lo cierto, es que ha podido con ello y recibir las muestras de cariño que le presentaban los compañeros periodistas lo ha dejado agotado, pero feliz.
Esta es la entrevista que ha mantenido con Castellón Información, que, aunque puede resumirse en unos párrafos, resulta mucho más impactante escucharla.
Porque a Alberto Fabra, con toda su alegría se le nota una voz cansada, muy lejos del tono que empleaba cuando estaba al frente de la Generalitat o cuando se codeaba con muchos de estos periodistas a los que atendía en el palacio municipal.
Dice que se encuentra bien, descansando en casa, donde intenta recuperar fuerzas y hacer ejercicios.
No sabe a ciencia cierta cuando se contagió, aunque sospecha que fue en Madrid, donde mantuvo una comida con otras personas que luego también dieron positivo en Covid-19.
En su casa, en Castelló, cuando notó los primeros síntomas, decidió confinarse en una cuarentena voluntaria. Era lo que marcaban los protocolos.
- La parcela cedida está junto al Hospital General de Castellón.
Pero la cosa fue a más. Cuando comenzó a padecer fiebre alta ingresó de madrugada un 18 de marzo en el Hospital General. Entonces todavía estaba convencido de que lo suyo sería breve. Indica que le sorprendió que le hicieran una placa de torax, porque para él el coronavirus era como una gripe de las de toda la vida. Y fue entonces cuando se le diagnostico una neumonía bilateral, tenía afectados los dos pulmones.
Cuando comenzaron los problemas respiratorios fue trasladado a la UCI, donde permaneció por espacio de dos semanas de las que dice no recordar absolutamente nada. Estaba sedado y controlado como todos los enfermos de la UCI las 24 horas al día.
El 17 de abril, después de haber abandonado la UCI días antes, por fin se le dio el alta hospitalaria. No podía ni caminar, se encontraba completamente agotado, había perdido ocho kilos y mucha masa muscular.
Y aún ahora, todavía le quedan, por lo menos otras tres semanas o un más hasta comenzar a ser el que era.
Alberto Fabra agradecía el interés de todos cuantos se preocuparon por él, los que estuvieron al pie del cañón, pero, sobre todo, agradece y valora el papel de los sanitarios que hacen un papel extraordinario. “Son unos grandes profesionales y no se valora todo lo que están haciendo”. “El trabajo que están haciendo es de héroes”.
Pero al mismo tiempo se lamentaba de la falta de medios con los que han estado trabajando esos sanitarios. Parece mentira que no cuenten con los elementos adecuados. “Es una irresponsabilidad por parte del Gobierno”
En un estado Centralizado por un Decreto de Alarma, el Gobierno debía de haber suministrado el material necesario para velar por el trabajo de esos sanitarios, y no ha sido así.
En cuanto al comportamiento de la sociedad, indica que “ha demostrado una madurez increíble” “La gente ha respondido con una responsabilidad y un compromiso espectacular. Y tenemos que continuar en esa línea, porque al final, es solo así como podemos garantizar que haya menos contagios y así poder vencer esta pandemia.”
Para Alberto Fabra otro tema de preocupación es la crisis económica que va a dejar el coronavirus, con la caída del PIB de España y los datos económicos son catastróficos. "Tenemos que trabajar para recuperar la normalidad y eso se tiene que hacer con responsabilidad, con sentido común y con un buen Gobierno"
Alberto Fabra sueña con poder pisar la calle, con poder salir al aire libre: “Tengo ganas de abrazar y poder dar besos, tengo mono de dar besos y de abrazar a los amigos, a los familiares”
