En los últimos años, el servicio de Publicaciones del Ayuntamiento de Castellón está sacando a la luz y recuperando para la actualidad, importantes textos sobre Castellón publicados en épocas pasadas, ya agotados y de dificultosa consulta, que constituyen parte del conocimiento histórico de nuestra ciudad y nuestros ciudadanos. En esa línea se han publicado textos tan significativos como: ‘Libro de Libro de cosas notables del padre Rocafort (1945)’, ‘Antigüedades de Castellón de Vicente Traver (1958)’, ‘Del Castellón viejo de Vicente Gimeno Michavilla (1926)’, ‘Casos y cosas de Castellón de Juan Balbás (1884)’ y el ‘Llibre de ordinacions de la vila de Castelló de la Plana de Luis Revest (1957)’.
El alcalde de Castellón, Alfonso Bataller, junto a la Vicealcaldesa, Marta Gallén, los concejales Miguel Ángel Mulet y Joaquín Torres, el cronista de la Ciudad, Tonico Gascó, el presidente de la Junta de Fiestas, Jesús López, y la reina de las fiestas, Cristina Pastor, ha presentado la edición facsímil del libro ‘Ordenanzas para el régimen y gobierno d ela ilustre villa de Castellón de La Plana. Año 1785’ con motivo de las fiestas de Sant Cristófol.
Así, durante el acto que ha tenido lugar en el salón de plenos del Ayuntamiento de Castellón, Bataller ha destacado que “una vez más, tenemos la oportunidad de profundizar, de conocer un poco más una parte de la historia de nuestra ciudad, de las costumbres y cultura del Castellón de hace unos siglos, a través de la edición de un libro. Y, también de nuevo, ponemos a disposición de nuestros vecinos y vecinas un ejemplar ‘facsímil’ que habla del funcionamiento y la manera de gobernar la ciudad y la promulgación de una serie de ordenanzas que tenía este Ayuntamiento”.
“Es cierto que en la época de la aprobación de estas ordenanza la población de la ciudad de Castellón era de unos 12.000 habitantes, pero la vocación de servicio y la necesidad de regulación de la vida municipal eran, ahora como entonces, la primera obligación y cometido del Ayuntamiento. En este libro encontramos reflejados también algunas de las señas de identidad, todavía vigentes de nuestra tierra. Como la importancia histórica de la actividad agrícola y su influencia en la geografía física y humana de Castellón”, ha destacado el primer edil.
“Los retos ante el aumento de población, el florecimiento y mayor protagonismo de los gremios y una incipiente protoindustria, hacían necesario adaptar las antiguas leyes forales a una administración más moderna, con nuevos cargos y atribuciones. Así, en este libro vemos reflejados claros precedentes de algunos de los cargos que todavía hoy perduran en la administración local, como los tenientes de Alcalde. También se comienzan a desarrollar avances en materia urbanística o de sanidad pública, lo que sentaba las bases de una ciudad como lugar de encuentro y disfrute de sus vecinos y patrimonio común de todos los castellonenses”, ha proseguido el primer edil, quien también ha destacado las 217 ordenanzas que regulaban los temas más variados sirven como ejemplo de la complejidad que iba adquiriendo una administración en la que hoy se trabaja, precisamente, para hacerla más abierta y accesible a todos los vecinos de la ciudad.
El Ayuntamiento en la época borbónica de Carlos III extiende su influencia a todos los niveles de la administración de entonces y tiene como claro ejemplo este libro del que hoy se presenta una edición contemporánea.
Detalles de la publicación
La lectura de este libro significa zambullirse de lleno en otra época bien distinta a la nuestra, pero donde los principales retos eran los mismos que el del cualquier otro Ayuntamiento a lo largo de la historia: proteger a los ciudadanos, conservar la ciudad en las mejores condiciones de salubridad, perseguir al delito, tener una Hacienda Municipal eficiente, en resumen, procurar el mayor grado de bienestar posible de los vecinos y vecinas.
Entre las páginas también “encontramos cargos y ocupaciones que no por antiguas dejan de tener vigencia en la actualidad, en el ámbito de la administración municipal o el festivo incluso. Así, tenemos el síndico, los alguaciles y maceros, el acequiero, porteadores de gigantes y cabezudos, el pregonero y relojero de la torre campanario, el ermitaño de la Magdalena….y un largo etcétera” ha explicado Bataller.
De la primera publicación de estas ordenanzas han pasado ya 228 años, pero “nos sigue pareciendo parte del día a día, ya que muchos de estos elementos o personajes son parte de nuestra tradición, de nuestras propias señas de identidad. Por todo ello, creo que la edición de este ‘facsímil’ de estas ‘Ordenanzas’ vuelve a ser todo un acierto. Tanto para estudiosos en la materia como para lectores de todo tipo, ya que la aproximación histórica puede servir y entretener a unos como a otros.”
El ‘Servei de Publicacions’ y la concejalía de Cultura han hecho posible hacer accesible este fragmento de historia.
“Y esto es así gracias a que acercándonos a las páginas de este libro, estamos mirando hacia el mismo Castellón que vivimos día a día, reconociéndonos a nosotros mismos, bebiendo en las fuentes de la historia de una ciudad que sigue creciendo, que sigue evolucionando. Un Castellón, un Ayuntamiento que, como el de este libro, tiene como objetivo principal el conseguir una ciudad mejor para todos. Así pues, espero que sean muchos los vecinos y vecinas que consulten este libro que hoy rescatamos desde el Archivo Municipal y difundimos a través de una nueva edición”, ha finalizado Alfonso Bataller.
