Estas residencias trabajan con personas menores de edad que cuentan con medidas de internamiento impuestas por la autoridad judicial
Castellón Información
La red de residencias socieducativas de la Generalitat, en la que se encuentran chicos y chicas menores de edad que deben cumplir una medida de internamiento impuesta por una autoridad judicial, ha acogido a un total de 453 chicos y chicas que han cursado estudios reglados, como pueda ser enseñanza obligatoria, bachiller o ciclos formativos, entre otros.
Así lo ha explicado la directora general de Infancia y Adolescencia, Rosa Molero, quien ha querido destacar "el esfuerzo realizado por los chicos y chicas residentes para seguir aprendiendo y construir su futuro", a la vez que ha reconocido "la dedicación del equipo docente que ha supervisado y animado a los y las adolescentes para que no perdieran de vista sus objetivos".
La Comunitat Valenciana cuenta con 9 residencias socieducativas en las que se atienden a adolescentes y jóvenes que han cometido un hecho tipificado como delito en el Código Penal y a los que el juez o la jueza de menores impone una medida de carácter educativo, con el objetivo de crear las condiciones de aprendizaje que permitan "su integración y su reinserción", ha explicado.
Molero ha precisado que, en la mayoría de los casos, los chicos y chicas que se encuentran en estas residencias han sufrido "desgastes y dificultades en el proceso de aprendizaje motivada por diversas causas", como pueda ser una situación de exclusión social o por la falta de normas y referentes en la unidad familiar.
En este sentido, ha indicado que para superar esta situación y lograr un "cambio de percepción e introducir elementos adaptativos en sus acciones cotidianas que favorezcan su inclusión social" es necesario trabajar con ellos y ellas "la formación y responsabilidad para vivir en libertad respetando a los demás", lo que se fomenta a través de la intervención educativa individualizada y grupal en diferentes áreas de la persona, como pueda ser la afectiva, la cognitiva, la ocupacional-laboral, la social y también la escolar.
Un curso diferente
La directora general de Infancia y Adolescencia ha resaltado las dificultades específicas que se han producido en el curso 2019-2020 como consecuencia de la pandemia por la COVID-19, lo que ha supuesto "un reto tanto para los y las adolescentes, como para el profesorado y las y los educadores de las residencias, que han tenido que adaptarse de las clases presenciales a la modalidad a distancia a causa del confinamiento".
"Las dificultades se han transformado en logros personales y en historias de superación", ha manifestado Molero, quien ha querido mencionar algunas de estas historias "que revelan esfuerzo, compromiso y ganas de aprender", como la de un adolescente que tenía un desconocimiento total del castellano, y ha logrado obtener el título de graduado en ESO "de manera brillante gracias a su esfuerzo diario".
Asimismo, ha recordado otros casos en los que los chicos y chicas han logrado superar sus estudios, a pesar de iniciar el curso desmotivado, y lo han hecho "con buenos resultados y con valoraciones muy positivas del profesorado".
Estudios reglados
Un total de 453 chicos y chicas que han pasado por residencias socieducativas han cursado estudios reglados. De ellos 270 han estudiado Educación Secundaria Obligatoria, 3 han obtenido el graduado escolar, 5 han pasado por Bachiller, y 22 han realizado un programa de cualificación profesional inicial, en su mayoría jardinería, carpintería, electricidad, peluquería y estética.
Por otra parte, 125 han estudiado Formación Profesional Básica, principalmente informática, carpintería y agraria; 12 han realizado un curso de Ciclo Formativo Medio, 2 han aprobado la prueba de acceso a grado medio; 7 han realizado la prueba libre para mayores de 18 años para la obtención del graduado en Educación Secundaria Obligatoria y 16 han seguido cursos laborales reconocidos organizados por ayuntamientos, cámaras de comercio o el Centro de Turismo de València.