Reivindican el local de la Asociación de la Guinea y piden voz en los proyectos urbanísticos de la ciudad
Representantes de más de 16 asociaciones de vecinos de Castelló,han mantenido una reunión esta tarde para poner en común sus quejas por la falta de atención que reciben del Ayuntamiento. Piden que se les tenga en cuenta con una verdadera participación vecinal, el local de la Guinea y que se escuche su voz en los proyectos urbanísticos que les afectan
Esperanza Molina/Castellón Información
Representantes de 16 asociaciones de vecinos de la capital de la Plana han mantenido una reunión en la Cámara Agraria para poner en común sus quejas por el tratamiento que el Ayuntamiento da a la Participación Ciudadana.
Ha sido la primera de las reuniones convocadas en la que se ha limitado el aforo por la Covid, pero donde han compartido su malestar por el trato que reciben de la entidad municipal.
Entre las quejas más comunes expresadas por todos ellos están que, el ayuntamiento los ningunea en todos los sentidos, no escucha sus quejas cuando las realizan y ni siquiera responde a sus escritos o reclamaciones.
Les ponen mil y un problemas cuando quieren contactar con los concejales del equipo de Gobierno o el responsable del área a la que pertenecen, bien porque está de vacaciones, bien porque no les coge el teléfono, bien porque ni siquiera responde a sus demandas.
Se han solidarizado con la Asociación de Vecinos de La Guinea, que sigue sin local pese a las demandas realizadas y temen que se trate de una práctica preconcebida para limitar la presencia de las asociaciones de vecinos. “No nos quieren y nos encontramos con un muro cada vez que necesitamos comunicar un problema de nuestra zona”.
Cada año modifican el momento y el modelo de las subvenciones, anunciaban algunos representantes vecinales, hasta el punto de que “para hacer una gestión me han devuelto 5 veces el mismo escrito y cada vez buscan un ‘pero para tener la excusa para rechazarlo”.
Afirman que el Ayuntamiento incumple la normativa de participación ciudadana y están decididos a movilizarse e incluso a verificar las ordenanzas que regulan o que pueden o no hacer y los derechos que tienen, porque están convencidos de que en algún caso se ha podido cometer prevaricación.
De esta manera, también afirman que la entidad municipal no consulta con ellos las diferentes modificaciones urbanísticas de las zonas que habitan. “Hemos dicho que no queremos que modifiquen la avenida de Lledó, pero están dispuestos a hacerlo, aunque no estemos de acuerdo. Han hecho lo mismo con avenida Capuchinos.
Han denunciado problemas con los contenedores, suciedad en algunas zonas y afirman que se sienten perseguidos.
Así las cosas, han decidido empezar a proyectar movilizaciones para “que se escuche la voz de los vecinos”.
