Para el alcalde es indudable que la muerte de un vecino en el bou per la Vila, ha supuesto un duro golpe para unas celebraciones que se estaban caracterizando por la normalidad.
El resumen de las fiestas patronales de San Bartolomé 2013, en la última jornada festiva, que a su vez es la más tranquila de todas, ha sido la alta participación. La apuesta por actos tradicionales, con el éxito garantizado, ha sido claramente acertada, dado que todas las propuestas cuya participación se esperaba masiva, no han defraudado. Indudablemente, la normalidad y buen desarrollo de los festejos se vieron empeñados por el trágico suceso que causó el fallecimiento de un vecino en el transcurso de la penúltima jornada taurina. “Un hecho desgraciado que nos paralizó a todos y que nos costará olvidar”, como ha afirmado el alcalde del municipio, Mario García, y que supuso la suspensión de los actos programados durante las 24 horas de luto oficial. Como ya destacó en su momento el primer edil “el comportamiento tanto de las peñas, como de los vecinos en general, ha sido ejemplar y estoy seguro de que la familia estará muy agradecida por ello”.
Pero sin olvidar, ni quitar relevancia a este trágico suceso en ningún caso, lo cierto es que “las fiestas podrían resumirse por la normalidad y buena participación, especialmente en los actos más populares”, como las exhibiciones taurinas, un total de 10 finalmente; la exitosa y divertida gincana de las peñas y el posterior Grand Prix, en el que se alzó con el triunfo la peña Trabubu; o el baile de disfraces, donde la originalidad fue la nota dominante, tanto en las críticas sobre la política nacional o la elección de temas muy locales, como la plaga de mosquitos que sufrió el municipio a principios del verano. Para Mario García, “los vecinos han demostrado que son los primeros a la hora de participar y pasárselo bien, pero también lo son cuando de mostrar su solidaridad y respeto se refiere, y eso convierte nuestras fiestas patronales en el mejor reflejo de lo que somos y cómo vivimos las cosas que nos importan”.
Una vez las celebraciones han llegado a su fin, es el momento de hacer balance “de felicitarnos por las cosas que han salido bien y analizar las cosas que no han salido tan bien, de manera que podamos mejorarlas”. Pero lo cierto es que la actividad festiva en Nules, lejos de decrecer, se va a mantener las próximas semanas, dado que ya se está ultimando el programa de las fiestas patronales en honor a la Mare de Déu de la Soledat, que se celebrarán a principios del mes de octubre, mientras que a mediados de septiembre, el municipio acogerá una nueva edición de la Feria de Ganadería y Maquinaria Agrícola, por lo “Nules va a seguir siendo durante un tiempo, foco de la actividad social y festiva, tanto de la comarca, como de la provincia”, concluye el alcalde.
