Alejandro Marín-Buck. Portavoz de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Castelló.
Lo ocurrido esta semana en el Ayuntamiento de Castelló, bien podría ser la sesión matutina del Circo Price, recordando los mejores momentos de los míticos Miliki, Gaby, Fofó, Fofito, Milikito o Rody, a cual mejor, sorprendiendo a su público con escenas que difícilmente se nos borrarán de nuestra retina. Lamentablemente el último pleno del consistorio constató que la improvisación, la falta de previsión y de diálogo son capaces de crear situaciones Kafkianas casi tan absurdas como la de los Payasos de la tele, donde por querer complacer al público, acababan tropezando con sus grandes zapatos rojos y con sus compañeros, tirando al traste la función y decepcionando al graderío.
Tras la suspensión de las fiestas de la Magdalena el 14 de enero, la alcaldesa manifestó públicamente que la No Magdalena sería lectiva, para evitar contagios, pero a partir de ahí, una sucesión de contradicciones, despropósitos, dejadeces y delegaciones, entre ayuntamiento, Consejo Escolar y consellerías de Educación y Sanidad, en manos de Compromís y PSPV, hicieron que la situación se tensase tanto, que llegaron hasta el último minuto del show sin una solución. Lo que nos ha llevado a que el lunes de Magdalena, el 8M sea lectivo y laboral, pasando el festivo local al 10 de septiembre, día fundacional de la ciudad. Mientras que los días 9, 10, 11 y 12 de marzo serán no lectivos como estaban marcados en el calendario escolar desde junio de 2020 y desoyendo las recomendaciones sanitarias de los expertos.
La convocatoria de un pleno extraordinario urgente la mañana del pasado lunes para cambiar el festivo local de la Magdalena antes de que se reuniera el Consejo Escolar Municipal esa misma tarde para decidir si el resto de semana era o no lectiva, nos pareció cuanto menos temerario, de ahí nuestra abstención en el voto. De nuevo, El 'desacord' del Fadrell, subestimó la inteligencia de los demás y demostró ser un gobierno en prácticas. Sin embargo, la mayoría de los becarios aprenden de sus errores porque tienen afán de superación, los socios del Fadrell llevan demasiado tiempo tropezando con la piedra de las desavenencias y el desgobierno que pagamos todos los castellonenses.
El embrollo es mayúsculo, ya que la universidad ha decidido acogerse a su propio régimen de festivos, independientemente de lo que se haya decidido desde el ayuntamiento, algunos colegios ofrecerán una 'escoleta magdalenera' solo para primaria y para unos 500 alumnos, olvidándose de infantil y secundaria, y sobre todo dejando a 32.000 alumnos en sus casas probablemente con sus abuelos, Dios mediante, ya que la jornada completa de la mayoría de los trabajadores nos impide conciliar con nuestros hijos esos días, lo que dinamitará las clases burbuja y pondrá en riego la trazabilidad de los contagios.
Miremos por donde lo miremos, todo esto es un despropósito. Con todo esto, Castellón ha sido trending topic durante horas y la viralidad de los memes han mantenido encendida la NO Magdalena. Qué lástima que haya sido por una gestión de un equipo amateur, creando confusiones y problemas que no ha agradado a nadie. Sra. Marco, la próxima vez que quiera cambiar algo piense lo que decía otro gran cómico español: "si hay que ir se va, pero ir pa ná, es tontería", y es más, casi que le diría lo que me decía mi abuela: "virgencita, mejor que me quede como estoy".
