Mientras siguen los trabajos para rescatar el cuerpo del estibador, se podrá buscar también dentro del buque volcado
El buque panameño, Nazmiye Ana, que volcó el pasado 28 de mayo en el Puerto de Castelló, ya está preparado para ser izado sobre el muelle del Centenario. Si no surgen problemas de última hora, la operación se realizará mañana. De esta manera, seguirán los trabajos para el rescate del estibador desaparecido al tiempo que se desguaza y se busca dentro de la nave.
Esperanza Molina/ Castellón Información
La empresa Ardentia Marine, contratada por las aseguradoras (P&I) del buque panameño Nazmiye Ana, ya tienen el dispositivo preparado con el que intentarán izar el buque para depositarlo en el muelle del Centenario del Puerto de Castellón.
No es tarea fácil, el buque tiene casi 80 metros de eslora (longitud) y 11 de manga (eslora), y se encuentra con la quilla al sol desde el pasado 28 de mayo. El accidente se produjo a caer la tarde cuando realizaba labores de carga de contenedores y sacas de material cerámico, antes de iniciar su ruta. En cuestión de segundos el barco volcó por completo. Hubo tres heridos (ya recuperados), un fallecido (un marinero indio) y un desaparecido, el estibador castellonense cuyo cuerpo sigue sin ser localizado.
Los trabajos en el Puerto de Castellón se han desarrollado con total celeridad dentro de los protocolos establecidos para evitar poner en riesgo la vida de las personas.
Por una parte, el casco del buque fue desplazado hacia el extremo del muelle, con el fin de dejar libre la zona donde supuestamente podría encontrarse el trabajador portuario.
La teoría que se baraja, es que el estibador pudiera haberse quedado atrapado en el fondo del mar entre el grueso de la carga, contenedores y material cerámico. El desplazamiento del Nazminye Ana ha permitido poder rastrear la zona con los perros de la unidad especializad de la Guardia Civil. Los canes detectaron restos humanos en lugar donde se encuentra la mayor parte de la carga, una montaña de 11 metros de altura bajo el mar.
Poco a poco, la empresa especializada, con la ayuda de los trabajadores portuarios retiran poco a poco la carga, aunque la operación es compleja porque, como comentaba un responsable de la empresa contratada, los materiales cerámicos se han convertido en una zona inestable que actúan a modo de arenas movedizas en la que los buzos no pueden apoyarse por el peligro de hundirse en ellas.
Además, cada operación que remueve estos minerales enturbia el agua y dificulta la visibilidad debajo del agua.
Tal como publicó Castellón Información, mientras se mantiene el servicio de rescate del estibador desaparecido, comenzó también otra operación paralela, la de izar el casco del Nazmiye Ana para depositarlo en el muelle del Centenario.
Estas tareas también han sido difíciles y han tenido que ser calculadas al milímetro. Ha sido necesario reforzar el lecho del muelle para evitar hundimientos con el peso y la fuerza que deberán ejercer las grúas que se utilicen en esta operación.
Sobre el casco se han dispuesto de varios puntos de anclaje, soldados cuidadosamente, donde deberán sujetarse los cables desde los que tirarán las grúas.
Si no surgen problemas de última hora, el objetivo es realizar el izado durante la jornada de mañana.
Con el casco sobre tierra, comenzarán los trabajos de desguace. Aunque todo apunta a que el estibador sigue enterrado debajo de la carga en el mar, poder entrar en el interior del buque también ayudará a despejar las dudas sobre si el portuario pudo quedarse atrapado dentro de la nave cuando volcó.