Los populares vienen denunciando desde el año pasado esta falta de gestión, que lleva a que Castellón siempre vaya por detrás, haciendo pagar a los castellonenses "la ineficiencia e ineficacia" del equipo de gobierno
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El portavoz adjunto del Partido Popular en el Ayuntamiento de Castellón, Sergio Toledo, reprocha a la alcaldesa Amparo Marco que se haya llegado al 20 de agosto y la capital no cuente con el presupuesto municipal del presente año en vigor. "Mientras Ayuntamientos como Onda ya trabajan en la elaboración del presupuesto municipal de 2022, como tendría que estar haciendo el equipo de gobierno de Castellón, en la capital seguimos a la espera de su aprobación definitiva, a pesar de la necesidad de inversiones en tiempo de pandemia", señala.
Toledo contrapone los dos modelos de gestión: "Es la cara y la cruz, mientras los ondenses ya pueden proponer a qué quieren destinar el dinero que sale de sus impuestos, porque el Ayuntamiento ha empezado a trabajar en la elaboración del presupuesto de 2022 abriéndolo a la ciudadanía, contando desde el inicio con la opinión de sus vecinos, apostando por la transparencia y trabajando desde la planificación y tiempo suficiente para aprobarlo en tiempo y forma, en la capital de la Plana seguimos con un presupuesto municipal de 2021 en fase de exposición pública hasta el 24 de agosto, porque el gobierno de Amparo Marco cerró las cuentas, sin consenso, con 7 meses de retraso y todavía no están disponibles".
Los Populares vienen denunciando desde el año pasado esta falta de gestión, que lleva a que Castellón siempre vaya por detrás, haciendo pagar a los castellonenses la ineficiencia e ineficacia que sigue demostrando el gobierno municipal de PSOE, Compromís y Podemos. "Es una vergüenza y una irresponsabilidad de la alcaldesa Amparo Marco que ha vuelto caer en los mismos errores del año pasado cuando el presupuesto de 2020 también se aprobó en agosto y entró en vigor casi en septiembre y, por falta de tiempo para ejecutarlo, se quedaron sin retornar a los castellonenses 35 millones de euros en forma de servicios e inversiones", recuerda.
Y añade: "Las mismas consecuencias auguramos para las cuentas de este año, volverá a quedarse en el tintero el dinero recaudado a los castellonenses que, por cierto, pagan impuestos de los más elevados, con un IBI que es el segundo más caro de España, con 402 euros de media por castellonense, una cantidad igual a la que pagan los habitantes de Barcelona y solo por detrás de Madrid, según la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (Airef), pese a la necesidad en materia de inversiones, en plena crisis económica para salvar a los sectores productivos ahogados por la pandemia, como el comercio, la hostelería, el turismo o el ocio nocturno, que sigue si poder desarrollar su actividad, entre otros".
"Está claro que la aprobación del presupuesto municipal tampoco ha sido, por segundo año consecutivo, una prioridad para el gobierno municipal, como sí lo ha sido la reforma de sus despachos o subidas de sueldo a personal de su confianza, como han hecho al aprobar el incremento de 63.000 a 68.000 euros anuales en las retribuciones de los gerentes de los tres Patronatos Municipales (Deportes, Fiestas y Turismo) y también del Pacto Local por el Empleo, teniendo en cuenta que el gobierno municipal ya se subió el sueldo un 50% al llegar a la Alcaldía hasta fijarlo en más de 78.000 euros anuales la alcaldesa Amparo Marco y en casi 63.000 euros anuales cada concejal del equipo de gobierno y de rodearse de un ejército de 21 asesores", concluye Sergio Toledo.
