Marisol Linares. Vicesíndica del Grupo Parlamentario Popular en las Cortes Valencianas.
Justicia es la palabra que se oyó más este domingo en la manifestación a favor de la Asociación de Víctimas del Terrorismo.
Miles de personas se concentraron en Madrid para rendir homenaje a las víctimas y familiares que han sufrido el zarpazo del terrorismo en España, mostrando así su repulsa por una sentencia totalmente injusta que se dicta a favor de los derechos humanos de quienes asesinan, y yo me pregunto: ¿Dónde estuvieron los derechos humanos de las personas asesinadas?
Resulta paradójico que los responsables de Sortu apelen ahora diciendo que los manifestantes son la España del año 1936, cuando has sido los asesinos de ETA los que iniciaron este horror con el tiro a la nuca simplemente por el hecho de ser guardias civiles, militares o personas que no compartían sus pensamientos.
Los del pensamiento único a que se refiere Sortu son únicamente los miembros de la banda terrorista ETA que con las pistolas y las bombas han querido imponer sus ideas en España y el País Vasco.
Los demócratas debemos estar unidos frente a los que quieren hacer tambalear la democracia utilizando la violencia.
EL PSOE con su actitud hipócrita no se puso del lado de las víctimas, dejando solos y abandonados tanto a miembros y familias de militantes del PSOE que han sido víctimas de ETA.
Lamentablemente, con su actitud el PSOE ha reflejado ser un partido residual, sin ideología, sin principios y sin rumbo. Espero que los ciudadanos tomen buena cuenta estas actitudes políticas.
La palabra JUSTICIA ha quedado desvirtuada cuando sólo se hace justicia con los asesinos y no con las personas asesinadas.
El tiempo nos dará la razón a los que el domingo estuvimos con las víctimas del terrorismo.
