David Vicente Segarra. Diputado provincial y alcalde de La Torre d'en Besora Desde el Partido Popular de la provincia de Castellón
En los últimos meses estamos viviendo –sufriendo, padeciendo…- una desorbitada escalada de los precios de la energía eléctrica. Esta situación, que incluso está poniendo en jaque las economías familiares y hasta el futuro de muchas empresas, es debido a varios factores que repercuten de manera directa en el precio de mercado mayorista. Es verdad que estamos en una situación pospadémica y con un conflicto armado en el centro Europa… Y muchos piensan que, tanto una cosa como otra, también influyen en el precio de la energía eléctrica.
Pero la realidad de todo esto es que tenemos un gobierno incapaz de poner coto a esta situación, de poder marcar unos máximos para que nuestra economía no se vea resentida y podamos seguir funcionando con normalidad. En las zonas de interior, nuestras industrias y familias ven como cada mes tienen que pagar facturas más y más altas, lo que provoca una gran incertidumbre: podrán pagar la factura de la luz el mes próximo. ¿Y el siguiente?
Por eso tenemos que reflexionar si vamos en la dirección correcta. Las administraciones actuales parece que solo quieren saber de energía renovable, pero precisamente tenemos que pensar que es la más cara de producir y que tanto las plantas fotovoltaicas como los aerogeneradores, no producen electricidad de forma continua, por lo que tenemos que seguir dependiendo de otros tipos de producción eléctrica. Y a todo esto hay que sumar la lentitud en la administración autonómica en tramitar las altas de las Comunidades Energéticas… Parece mentira que PSOE y Compromís, que son los que más promueven este tipo de instalaciones, como si fuese una panacea: sean, precisamente, los que mayores dificultades ponen para ponerlas en marcha.
En ningún momento, desde el PP, dejamos de ser defensores de las renovables y de sus ventajas, como el ahorro grandes cantidades de CO2 a la atmósfera. Pero también somos conscientes de que, hoy por hoy, no podemos prescindir de las demás fuentes de energía por coste y por producción.