La Confederación recrecerá los muros de la desembocadura y el ayuntamiento actuará sobre el puente de Ferrandis Salvador
La actuación sobre el último tramo de la desembocadura del río Seco de Castelló para aumentar su capacidad de desagüe ha llegado por fin a un protocolo de actuación entre la Confederación Hidrográfica del Júcar y el Ayuntamiento de Castelló, con más de 11 años de retraso sobre el proyecto ‘urgente’ que la CHJ debería haber ejecutado hace una década. La CHJ recrecerá los muros de la desembocadura y el Ayuntamiento modificará el puente de Ferrandis Salvador.
Esperanza Molina/ Castellón Información
Una vez más han tenido que ser las precipitaciones y las lluvias continuadas sobre la capital de la Plana las que obliguen a plantear soluciones para la capacidad de desagüe del Río Seco, que debía haber afrontado la CHJ hace ya más de 11 años.
En aquel momento, la CHJ planificó una memoria en la que planteaba ampliar el canal de salida del río sobre los terrenos del aeródromo, y prolongar, por tanto la longitud del puente situado sobre Ferrandis Salvador.
Pero aquella memoria valorada ‘urgente’, estaba presupuestada en torno a los 10 millones de euros y la Confederación nunca dispuso de presupuesto ni de proyecto definitivo para abordarlo.
La cosa era aún más grave si se tiene en cuenta, que las otras necesidades del término municipal, como la del encauzamiento de los barrancos situados al sur del termino municipal, entre los que se encuentra el Barranco del Sol, estaban condicionados a que primero se abordara la ampliación de la desembocadura del Río Seco.
No se podía canalizar el Barranco del Sol al cauce del Río Seco si primero no se adecuaba esta desembocadura para permitir el aumento de caudal.
Pero después de una década sin conceder los permisos necesarios, tal como informó Castellón Información el 23 de junio de 2021, la Confederación reconocía que quizá, aquella primera propuesta, había sido un tanto exagerada.
Fue entonces cuando volvieron a sentarse a negociar ayuntamiento y Confederación, y cuando se llegó al acuerdo de que sería el Ayuntamiento de Castelló el que realizaría el estudio para: el encauzamiento Barranco del Sol y la ampliación de la desembocadura del río Seco.
De esta manera, el nuevo planteamiento pasaba por: desentenderse de todo lo anunciado, es decir, la ampliación de la desembocadura, aunque deberían recrecerse los muros de ese último tramo del río y además actuar sobre el puente de Ferrandis Salvador.
El reforzamiento de los muros de los márgenes del río evitará que se desborde si se producen fuertes lluvias y aumenta el caudal. En cuanto al puente, no habría que ampliar sus dimensiones, pero si modificar su diseño, para que pueda tener más capacidad de salida del agua.
Según ha informado el Ayuntamiento de Castelló, el protocolo de actuación sobre el río Seco ha pasado por comisión informativa y llegará por la Junta de Gobierno del próximo jueves.
Este acuerdo, que llega casi un año después de que se planteara el nuevo diseño, y once después de la ‘actuación urgentes’ que nunca se llevó a cabo. Se plantea como un protocolo de intenciones para promover la redacción del proyecto y la ejecución de las obras a realizar en el entorno de la desembocadura del Río Seco, en el marco del Plan de Gestión de Riesgos de Inundación, aprobado por el Real Decreto 18/2016, de 15 de enero, con el objetivo de aumentar la capacidad de desagüe.
Dicho de otra manera, hay consenso sobre quién tiene que hacer qué. A grandes rasgos, corresponderá a la CHJ la redacción de un proyecto constructivo y la ejecución de las obras relativas a actuaciones de mejora de la capacidad del encauzamiento existente con la construcción de nuevos muros de mayor altura localizados en ambas márgenes del encauzamiento del Río Seco.
Y al ayuntamiento, le corresponderá, a su vez, la redacción de un proyecto constructivo y la ejecución de las obras relativas a la adecuación del puente de la CV-1501 (Ferrandis Salvador) para aumentar la capacidad de evacuación del río.
Encauzamiento del Barranco del Sol
Por otra parte, la firma de este protocolo desbloquea otra actuación fundamental para la ciudad en general, y en particular para los vecinos del Grupo San Agustín y San Marcos: el encauzamiento del Barranco del Sol.
Sobre este particular, las propuestas municipales pasan por: desviar y canalizar parte del caudal del barranco del Sol que baja de la montaña para que desemboque en el lecho del río Seco, en un cauce que discurriría paralelo al cementerio de San José. De esta forma, se reducirá el agua que se acumula en la zona sur del barrio de San Agustín y San Marcos.
En esta zona del término urbano, lo que se hará será canalizar por el subsuelo los aportes hídricos de las escorrentías de la zona elevada al el Barranco del Sol por la Cuadra Segunda y el Barranquet, por el subsuelo para verterlos al cauce del Río Seco pasada la circunvalación.
Según ha destacado la alcaldesa de Castelló, Amparo Marco: “Con este protocolo se plasma un trabajo conjunto entre el Ayuntamiento de Castelló y la Confederación Hidrográfica del Júcar para impulsar un proyecto estratégico de ciudad que atienda una demanda histórica y dé solución a los problemas de inundabilidad que se producen tras episodios de fuertes precipitaciones”.
El concejal de Urbanismo, José Luis López, por su parte, ha destacado que el Ayuntamiento avanza de forma paralela en el proyecto de canalización del Barranco del Sol a su paso por San Agustín y San Marcos, con una intervención valorada en 2,5 millones de euros que tiene como objetivo acabar con los problemas de inundación en la zona. Con esta actuación se pretende atajar los problemas de inundación que actualmente se producen durante episodios de lluvias en la zona del Barranquet y Cuadra Segunda. Para ello, se ha previsto la ejecución de un colector de pluviales con una longitud aproximada de 735 metros bajo la calle actual que capte las aguas en la intersección entre el Barranco del Sol y el Camí de la Cuadra Segunda hasta los marcos ejecutados por las obras de soterramiento del tren. Asimismo, en este proyecto se prevé la reposición de los servicios existentes, las aceras y los viales afectados por las obras.
