Dime de qué presumes y te diré de qué careces. El refranero popular es muy sabio, y una vez más pone de manifiesto las carencias del equipo de gobierno de Castellón en materia de conciliación familiar, porque este año ha dejado en la estacada a 2.000 niños, y sus respectivas familias, al no organizar las tradicionales ‘escoletes d’estiu’.
Ni siquiera se han molestado en justificar los motivos por los cuales no se han organizado los programas Temps d’Esplai, Ven al Pinar y Ocio Educación Especial. Desde el Partido Popular deducimos que una vez más esta carencia se debe a la falta de previsión y de trabajo por parte del equipo de gobierno del Ayuntamiento de Castellón, que está más pendiente en cambiar el nombre de las calles o en abrir en canal la ciudad con obras que nadie ha pedido, en lugar de facilitarle la vida a los vecinos con niños y niñas a su cargo, que tienen que trabajar, y que han tenido que buscarse la vida para asegurarse que sus hijos estaban atendidos, porque el Ayuntamiento, este año, ni está ni se les espera.
¿Es así como se defiende la conciliación laboral y familiar? ¿Es así como se trabaja por la igualdad de oportunidades? La respuesta es, evidentemente, no. El curso acabó el pasado martes, 21 de junio, y la mayor parte de las familias solo tiene a día de hoy promesas de que el equipo de gobierno está trabajando en ofrecer alternativas, que en realidad no son más que parches, como los prometidos bonos sociales, que a día de hoy no se sabe ni a qué cuantía ascienden, ni a quién beneficiarán, ni cómo se conseguirán o justificarán… Por no hablar de que las familias no pueden estar esperando en casa de brazos cruzados a que alguien aporte la solución.
Al final, los castellonenses están pagando una vez más los platos rotos respecto a una gestión que siempre es tardía e improvisada, en este asunto como en tantos otros.
Ante esta situación de dejadez proponemos la elaboración del I Plan de conciliación familiar y laboral para ayudar a las familias castellonenses, donde no pueden faltar les ‘escoletes d’estiu’ municipales. La educación no es algo que pueda decidirse a última hora y con prisas por no planificar a tiempo. Los castellonenses merecen un gobierno que esté por solucionarles los problemas, no por crearles nuevos donde no los hay. Ese es nuestro compromiso, y a ello nos pondremos a trabajar tan pronto como los ciudadanos nos den su confianza. Sí a la conciliación familiar, pero la real, la que de verdad beneficia a los castellonenses, más allá de titulares bonitos de prensa que no se corresponden con la realidad.
