El ayuntamiento de Castelló se plantea recortar el aforo público a la parte noble del edificio para evitar incidentes de seguridad
La Junta de Gobierno Local ha aprobado una modificación presupuestaria en las obras de rehabilitación del edificio municipal. El estado de las viguetas del techo de la primera planta no garantiza la estabilidad del edificio. ¿Se pueden hunden las oficinas de la Alcaldía o el Salón de Plenos? De momento no, pero hay que hacer reparaciones urgentes y recortar el aforo para prevenir incidentes.
El edificio Consistorial de la Plaza Mayor necesita de nuevas reparaciones. Y no es ninguna broma.
El pasado 3 de marzo de 2022 el Ayuntamiento de Castelló adjudicaba las obras de remodelación parcial y distribución interior de las plantas 1ª y 2ª del Palacio Municipal con un presupuesto de casi 385.000 euros.
El objetivo era modernizar el edificio dentro de las modificaciones interiores que se han realizado, para la ubicación de las oficinas de atención municipal. El plazo de las obras era de 4 meses.
Sin embargo, las obras no pudieron avanzar como estaba previsto. Y es que cuando los obreros comenzaron a trabajar en la planta primera descubrieron una serie de deficiencias que aconsejaban una intervención más detallada.
Según el informe realizado por el director de la obra en julio de este año, cuando se procedía a desmontar el falso techo de la primera planta, se observó que, en las zonas recayentes a las plazas del Mercadillo y la Pescadería, ese falso techo ocultaba otro falso techo de cañizo de mayor antigüedad al que se anclaban las instalaciones.
Demolido también ese segundo falso techo, se descubrió la cara inferior del forjado que sostenía la planta noble del edificio municipal, integrado por “viguetas de madera de pino de sección irregular y revoltón cerámico con evidentes señales de deterioro en su superficie y flechas excesivas en el centro de los vanos”. Es decir, viguetas que no se encontraban en buen estado y que exigían un estudio en profundidad sobre su situación y las intervenciones a las que había de proceder para dotarlas de mayor seguridad.
De esta manera, el ayuntamiento encargó un informe a una empresa especializada de Castelló.
EL forjado no garantiza la seguridad estructural del edificio
El resultado de ese estudio determinó: que el estado de estos forjados se encontraba muy deteriorado, hasta el punto de que no garantizaban “la seguridad estructural del edificio”. Por ello recomendaba un refuerzo total de las viguetas.
Los defectos de estas viguetas afectan directamente a la estabilidad de la parte noble del edificio municipal en la zona de la plaza Pescadería, donde se encuentran los despachos de la Alcaldía y Sala de Junta de Gobierno. Y también en el otro extremo del edificio, donde se encuentra el Salón de Plenos que recae sobre la plaza del Mercadillo.
Intervención urgente
La intervención era urgente. Las obras de remodelación de la planta primera no podían seguir adelante sin antes arreglar las viguetas del techo. Y la seguridad de las áreas de Alcaldía y del otro extremo del edificio generaba riesgos para las personas.
Por otra parte, la intervención suponía un sobre coste sobre el presupuesto original de las obras, que debía aprobar y formalizar el ayuntamiento.
El sobre coste ha sido estimado en más de 88.000 euros sobre el presupuesto inicial de la adjudicación. La normativa permite introducir ‘modificados’ en el coste final de las obras, siempre que sean justificados. De la misma manera, se amplía el plazo de ejecución de las obras.
En cualquier caso, al tratarse de un incremento que ronda el 30% sobre el precio de adjudicación ha sido necesario un informe que justifica el nuevo presupuesto porque “las obras proyectadas afectan a la estabilidad del edificio”. Señalan además, que “Las modificaciones a introducir derivan de circunstancias sobrevenidas, que eran imprevisibles en el momento en que tuvo lugar la licitación del contrato. Afectan principalmente a la estructura sustentante del edificio y puntualmente al trazado de las redes de instalaciones a ubicar sobre los falsos techos, con incidencia en la memoria constructiva, las mediciones y el presupuesto, aunque las necesidades básicas a satisfacer en el proyecto vigente y los criterios expresados en el mismo siguen siendo válidos en general”.
La Junta de Gobierno Local ha dado luz verde a este incremento de presupuesto.
Ahora bien ¿Será suficiente el refuerzo de las viguetas del techo o cabría introducir medidas adicionales?
Reducir el aforo de acceso al edificio
En este sentido, el concejal de Urbanismo, José Luís López, portavoz también del equipo de gobierno ha manifestado que será preciso reducir el aforo del edificio. De forma más drástica mientras duran los trabajos y se refuercen las viguetas del techo de la primera planta. Y de forma más ligera después, en atención a la antigüedad del inmueble, aunque no hay informes técnicos que demuestren la existencia de riesgos en otras zonas del Palacio Municipal.
¿Había pasado antes?
Esta no es la primera intervención puntual sobre la estructura del edificio del palacio consistorial en la parte noble. De hecho ya se realizaron algunas intervenciones durante el mandato de José Luís Gimeno, concretamente sobre el suelo del despacho de la Alcaldía cuando ya se observó que una de las viguetas del suelo necesitaba de reparación y se realizó una intervención para reforzar el forjado.
