La feria Cersaie, el mayor y más importante escaparate de la industria cerámica a nivel mundial, ha finalizado, al parecer, con un balance positivo. Por lo menos, las impresiones que nos han hecho llegar los empresarios hablan de mucho público en los estands y de un crecimiento del interés internacional por la cerámica de Castellón. ¿Pero a las empresas les es rentable producir y vender baldosas al precio desorbitado que tiene el gas, y la luz, y las materias primas?
Por eso, y para consolidar el correcto –y necesario- crecimiento de la marca Tile of Spain en el mundo entero hace falta que el Gobierno de España adopte las medidas exactas para proteger a un sector que no solo es un claro generador de riqueza y de empleo, sino también el mejor embajador de nuestra provincia en los cinco continentes.
Hacen falta medidas económicas reales y eficaces para que el clúster cerámico de Castellón no pierda capacidad competitiva. Pero hacen falta ya. De manera urgente. Nos estamos jugando el futuro de toda una provincia, nuestra provincia. Por eso, desde el PP hemos presentado un manifiesto en defensa del empleo y del futuro del sector cerámico que ya se está registrando en los ayuntamientos para recabar el consenso de todos los partidos políticos. Miles de empleos ya están afectados por ERTE y es nuestra obligación trabajar por el bienestar de los castellonenses..
El PP tiende la mano al resto de partidos políticos para buscar soluciones que puedan mantener el empleo y el tejido productivo en la provincia. Y por eso hemos dado un paso al frente con la elaboración de un manifiesto que nace con vocación de consenso y unión porque el futuro solo se puede ganar entre todos.
En el PP hemos oído a las patronales cerámicas ASCER y ANFFECC y nos han traslado la necesidad de aumentar las ayudas directas a las empresas para paliar los efectos de la subida del precio del gas, del mismo modo que se está haciendo en otros países de la Unión Europea como Alemania, Francia o Italia.
Pese a la tormenta perfecta que está padeciendo el sector, las empresas no han bajado la guardia, como ha quedado patente en Bolonia, y mantienen su esfuerzo por seguir siendo líderes mundiales. Y la Administración también debe estar a la altura y aportar medidas para la recuperación económica de nuestro clúster cerámico, el más importante de Europa. Y es que si a la cerámica le va bien, a todos nos va bien.