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viernes, 22 de noviembre de 2024 | Última actualización: 22:28

El Partido Republicano de Castellón

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Pedro Tejedo. Abogado.

Entre las lecturas de este pasado verano me gustaría recomendar un libro que creo de obligado conocimiento para aquellos castellonenses interesados en la historia política de nuestra provincia. El libro en cuestión se titula como este artículo: “El Partido Republicano de Castellón (1868-1936)”, su autor es Germán Reguillo Simón y está editado por la Diputación de Castellón. Se trata de un brillante y completísimo estudio de la trayectoria de este singular partido castellonense.

Lo primero que debe destacarse es la primacía del PR-CS desde su origen, en tiempos del Sexenio, hasta su desaparición con la guerra (in)civil de 1936. El libro recoge y analiza los resultados de todas las elecciones, tanto municipales como generales, celebradas en la provincia de Castellón durante dicho periodo y constata que pese al caciquismo imperante durante la Restauración que condicionaba los resultados electorales a favor de los partidos turnistas en el gobierno (¿a qué nos suena?), en la provincia de Castellón, singularmente en su capital, el partido predominante fue el PR-CS.

Se refleja también en el libro la evolución de PR-CS, desde unas posiciones claramente de izquierdas hasta convertirse en un partido moderado, de corte centrista durante la II República. Si bien dicho cambio en la calificación del PR-CS se debe más que a un cambio en las ideas del propio partido al cambio producido en el paisaje político entre 1868 y 1936. Así, por ejemplo, su anticlericalismo lo situaba en la extrema izquierda en 1868 y, sin embargo, ese mismo rasgo era compatible con su centrismo durante la II República.

Si pudiéramos resumir las características del PR-CS podríamos anotar las siguientes:

-  Republicanismo.

-  Laicismo, anticlericalismo: Defensa de la escuela laica, de la separación del Estado y de la Iglesia, aconfesionalidad de los poderes públicos.

-  Reformismo liberal: Defensa a ultranza de los derechos individuales y de las reformas sociales para la creación de una sociedad más justa e igualitaria. Defensa de la lucha política democrática frente al uso de la violencia.

-  Españolidad: como partido político progresista, defensor de los derechos individuales, defiende los derechos de los castellanohablantes; partido de corte federal defiende a ultranza la autonomía de la provincia (hay un evidente recelo frente a un autonomismo valenciano en que imperase el centralismo de Valencia)

-  Transversal: Tanto desde un punto de vista ideológico como desde la condición social de sus votantes.

-  Racionalista, democrático, progresista. En este sentido es contrario al nacionalismo político que, en palabras de Don Fernando Gasset, suponía un grave peligro por sus caracteres regresivos y atávicos.

Respecto al éxito de este partido, Germán Reguillo lo atribuye a que respondía perfectamente a la idiosincrasia de la sociedad castellonense. Ésta era una sociedad interclasista, con una propiedad agrícola muy repartida y un elevado porcentaje de trabajadores que eran, a su vez, propietarios de pequeñas extensiones agrarias así como de su vivienda, lo que suponía un caldo de cultivo adecuado para lograr el equilibrio social y político y el éxito de un partido como el PR-CS, partido interclasista con gran implantación popular, defensor a la vez de la propiedad privada y de las clases populares que, como hemos referido, en Castellón eran mayoritariamente pequeños propietarios. Esta circunstancia explica, por ejemplo, que el voto de los trabajadores se inclinara por el PR-CS frente al PSOE, que desde su fundación en 1879 hasta 1936 sólo obtuvo 3 concejales en la ciudad de Castellón y 2 Diputados en el Congreso por la provincia de Castellón.

Germán Reguillo realiza también apuntes biográficos de las principales figuras del PR-CS, donde cabe destacar a Francisco González Chermá, su fundador y primer alcalde democrático de la ciudad de Castellón, y a Don Fernando Gasset, presidente del partido durante muchos años, diputado en el Congreso en varias ocasiones y Presidente del Tribunal de Garantías Constitucionales durante la II República. Don Fernando Gasset, sin duda, es el personaje político castellonense anterior a 1936 del que se guarda mayor recuerdo en Castellón, y aún es frecuente escuchar a muchos castellonenses al referirse a la posición política de su familia en aquellos años diciendo mi familia era de Gasset.

En definitiva, un interesantísimo libro por el que debe felicitarse a su autor, Germán Reguillo, que a la par que analiza el periplo del PR-CS, nos describe pormenorizadamente los rasgos de la sociedad castellonense de aquella época así como la vida política en Castellón dentro del conjunto de la política nacional.

Por último, la lectura de este libro nos hace también meditar sobre la vigencia de las ideas defendidas por el PR-CS y sobre qué partido actual, desde luego ninguno de los partidos turnistas de hoy, se encuentra más cercano a las mismas.