El ayuntamiento expone las soluciones y abrirá una oficina de atención personalizada. Los marjaleros aceptan, pero desconfían
Primera reunión entre los técnicos y el concejal de Urbanismo con los vecinos de la Marjalería para exponer las medidas con las que se pretende regularizar la zona. El encuentro se saldó con muchas preguntas, vecinos desconfiados que denuncian multitud de situaciones y que acusan al Ayuntamiento de no haberlos atendido en años. El ayuntamiento abre una oficina para informar a los vecinos caso por caso.
Más de un centenar de vecinos de la Marjalería acudieron a la reunión convocada por el Ayuntamiento y la Asociación de Vecinos, para exponer las soluciones adoptadas en el nuevo Plan General para regularizar las viviendas de la zona.
No era una reunión fácil, y de eso ya se habían percatado los representantes municipales. Porque los marjaleros afirmaron que se habían sentido abandonados durante años; que se les ‘toreaba’ en la administración, que son muchas las veces en las que se les prometen soluciones; y que hasta ahora han sido ‘la hermana pobre’ de Castelló, a la que se pretende contentar cuando llegan las elecciones.
Con los ánimos más que caldeados, los representantes municipales (el concejal de Urbanismo, José Luís López, la teniente alcaldesa del Grau, Mª Carmen Ribera, y los técnicos de Urbanismo, desembarcaron en la Marjalería. Para avalar sus promesas llevaban una serie de folletos con los que pretendían respaldar sus promesas de solución a los problemas planteados.
Folletos como el que se muestra a continuación que, en realidad, dice muy poco para lo que querían saber los marjaleros, donde cada situación es un caso diferente que necesitará de soluciones puntuales.
El concejal de Urbanismo explicó a los marjaleros que, una vez aprobado el Plan General, y con el respaldo jurídico adecuado, toda la zona conocida como Marjalería, será parcelada y calificada dentro de dos grandes bloques: Suelo Urbano, y Suelo No Urbano.
Y es que, según explicó el técnico municipal, la conselleria no ha permitido poder declarar como suelo urbano toda la zona de la Marjalería poblada por las viviendas construidas antes de agosto 2014.
Se refería a la Declaración de Impacto Ambiental de la Conselleria de Medio Ambiente (Date). Pero lo que omitió es que la Date recortaba sobre una limitación previa realizada por el Ayuntamiento antes de solicitar esa declaración de Impacto ambiental.
De esta forma, muchas de las viviendas que antaño estaban en Suelo Urbano o Urbanizable, pasan ahora a estar situadas sobre Suelo No Urbanizable o Suelo Rústico.
Suelo Urbano
En los primeros casos, en los que el suelo sobre el que se asientan las viviendas está calificado como Suelo Urbano, también se dan diferentes circunstancias: Hay viviendas que ya lograron legalizar por completo su situación hace años. Disponen de servicios de alcantarillado, luz y agua. Y consiguieron su cédula de habitabilidad.
En este caso, cabe suponer por lo que se ha declarado esta mañana, que los vecinos que gozan de este privilegio posiblemente ya lo tengan todo hecho. ¿O no?
En cualquier caso, todas estas zonas de Suelo Urbano deberán desarrollar un Plan de Remodelación Interior, en el que se certifique su cumplimiento con las normativas de una ‘urbanización blanda’, o en el que se analicen y propongan las medidas a desarrollar que pasarían por: la dotación de alcantarillado, servicios de luz y agua, y ojo, una anchura de caminos adecuada para la dotación de aceras, el acceso de vehículos de emergencia o de servicios.
Anchura que, aunque no ha quedado del todo clara, porque según uno de los momentos de intervención del técnico municipal debería ser ¿de 30 metros? Y también la obligación de ceder caminos y viales al Ayuntamiento para su mantenimiento.
Las viviendas situadas sobre Suelo Urbano, una vez regularizadas y con servicios, gozarán de toda la legalidad y en su momento podrán plantear proyectos de obras o modificación si las ordenanzas de la zona lo permiten, como ocurre en otros puntos urbanos de la ciudad.
Pero en las zonas calificadas como No Urbanizables, o de Suelo Rústico, la cosa se complicará un poco más. De momento son viviendas que solo pueden realizar reformas puntuales en el caso de que sean imprescindibles para la habitabilidad de los inmuebles. Y eso no cambiará demasiado en un futuro.
Porque serán viviendas legales (siempre que se hubieran construido antes de agosto de 2014) desde el punto de que podrán regularizar su situación con servicios de alcantarillado, luz y agua, como las de Suelo Urbano, y tendrán su cédula de habitabilidad pero no permitirán ningún tipo de modificación por el suelo donde están ubicadas.
En el folleto que se ha repartido esta mañana y que se entregará a todos los vecinos de la Marjalería zona por zona, lo más importante es que se establece una Oficina de Consultas donde personal técnico atenderá a los afectados por la mañana. Para ello será necesario solicitar cita previa con el fin de facilitar la asistencia y poder resolver caso por caso de los planteados.
El concejal de Urbanismo ha puesto como ejemplo de estas actuaciones de urbanización ‘blanda’ las obras desarrolladas en el Grupo de Los Ángeles, donde ha manifestado que los vecinos están más que contentos con el resultado.
Los vecinos podrán agruparse para urbanizar sus zonas respectivas a través de gabinetes técnicos privados, o será el ayuntamiento el que redacte esos planes de urbanización en cada una de las parcelas previamente determinadas.
En el primer caso, el procedimiento será mucho más rápido, aunque deberán ser los vecinos los que asuman el gasto. En el segundo, será más lento pero gratuito para los vecinos.
Los Planes de Reforma Interior que afectan a los vecinos con viviendas en Suelo Urbano serán aprobados directamente por el ayuntamiento. En lo que afecta a los vecinos con viviendas en Suelo No Urbano, aún cuando la planificación sea realizada por los técnicos municipales, habrá de ser aprobada por la Conselleria.
¿Cuánto y cuando tendrán que pagar los vecinos?
Como ha explicado el concejal de Urbanismo, el coste de cada operación dependerá de la superficie afectada y del tipo de urbanización que se desee desarrollar. Las parcelas más grandes pagarán más que las pequeñas y las urbanizaciones básicas, menos que las más ‘elaboradas’. Por ley el Ayuntamiento contribuirá con un 10% y el resto habrá de ser sufragado por los vecinos después de que se ejecuten las obras.
Según el técnico municipal, el proceso ahora no será rápido, pero será imparable.
Dicho todo esto comenzaron las preguntas y la manifestación de muchos de los marjaleros. Muchos de ellos preguntaron si esta vez les serviría para algo, porque, indicaban, con el Plan Especial de la Marjalería muchos ya realizaron procedimientos que, en teoría, les legalizaba las viviendas.
López pidió perdón en nombre del Ayuntamiento por todos aquellos que, en su momento realizaron los trámites tal como les exigía el Plan Especial de la Marjalería y solo obtuvieron un ‘diploma’ que no sirve para nada.
La realidad es que el antiguo Plan Especial de la Marjalería ya proponía una parcelación y un modelo de regularización más amplio que el actual, (muchas viviendas que entonces estaban en Suelo Urbano han pasado a situarse en Suelo no Urbano con el nuevo Plan General) que también debería haberse llevado a cabo por fases. Lo que ocurrió entonces, es que para poder desarrollar aquel Plan había que generar una serie de infraestructuras, como colectores de alcantarillado, que tenían un precio elevadísimo y nunca se llegaron a realizar.
Como las viviendas dependían de aquellas infraestructuras, pasados los años vuelven a encontrarse con los mismos problemas.
José Luís López ha explicado que, aquellos que ya realizaron un proyecto de urbanización sobre sus viviendas, posiblemente puedan aprovecharlo para el desarrollo actual. Por lo tanto, el documento podría ser válido. Lo que no se sostiene de ninguna manera ni vale para nada es el diploma que se les entregó entonces.
Por otra parte, hay muchas condiciones que han cambiado y que los vecinos de la Marjalería denuncian porque ni reciben explicaciones ni se les atiende como sería deseable.
En este sentido hablaba una de las vecinas, que señalaba que había acudido una y mil veces a la oficina técnica municipal donde no se le daban explicaciones, se rechazaba la documentación sin detalles de por qué lo hacía, pese a que cumplía las normativas anteriormente vigentes que se publicaron en el Boletín Oficial del Estado.
Es más, indicó se la dirigió expresamente a una empresa determinada, con nombres y apellidos para el tratamiento de su fosa séptica. “Se nos ha tenido marginados, desatendidos y olvidados, y son darnos ninguna explicación”.
Ese comportamiento señaló el concejal, "es injustificable y puede poner una denuncia", a lo que la vecina contestó: "¿Cómo? ¿a quién?, no nos atienten durante años y ahora dicen que podemos denunciar?
Como se puede imaginar, la temperatura de la reunión subía por momentos y más y más vecinos plantaban temas y consultas ‘acumuladas’ durante años.
López señaló que, con la actual Ley del agua, no se permitirá ninguna fosa séptica en ninguna de las zonas habitadas de la Marjalería. Eso significa que habrá que poner alcantarillado en todos los lugares en que las condiciones lo permitan. Esa instalación será secuencial, porque no sería lógico saltar de un punto a otro, sino el de dar continuidad a las canalizaciones zona por zona.
En los suelos No Urbanos donde sea imposible instalar el alcantarillado se estudiarán los procedimientos de Minimización de impactos que, en algunas ocasiones podría suponer la creación de pequeñas depuradoras par grupos de viviendas. Aunque como ya se ha avanzado, cada caso es un mundo y deberá ser estudiado por separado.
Otro punto importante es que estos planes de urbanización afectarán a todos los vecinos afectados en cada una de las parcelas que se delimiten. Aquí no valdrá negarse, porque el desarrollo afectará a todas las viviendas de esas parcelas y se quiera o no, los vecinos habrán de pagar al final por esa urbanización.
Más temas que surgieron en la reunión fueron: La inundación de la Marjalería por el deterioro de las instalaciones de desecación; la necesidad de solucionar el colector central que afecta a las inundaciones de Bovar, Senillar y Molinera; o el camí de la Mota del Riu Sec.
El Camí de la Mota del Riu Sec es de la CHJ
En lo que concierne al camí de la mota del Riu Sec, o para entenderse, el vial que discurre paralelo al río Seco que se encuentra lleno de agujeros y socavones de gran tamaño, los vecinos denunciaron que el deterioro avanza inexorablemente y son ya mucho los pinchazos, los accidentes, y lo que es peor, la falta de seguridad que puede llegar a originar muertos como la cosa siga de esta manera.
El concejal de Urbanismo explicó que ese vial no es titularidad municipal sino de la Confederación Hidrográfica del Júcar. No es un vial pensado para el tipo de tráfico que soporta, y además, podría ser hasta ilegal la circulación de cierto tipo de vehículos, como camiones. El ayuntamiento, dijo, solo puede reparchear puntualmente. Lo que se persigue es que la Confederación del Júcar ceda la titularidad al Ayuntamiento. En ese caso se abordaría una urbanización más completa. Una nueva plataforma, con aceras y carril bici y se podría optar por un mantenimiento más adecuado.
Lo mismo ocurriría como algunos de los caminos entre acequias, que se deterioran visiblemente hasta el punto de que se desprenden tramos en los caminos.
Si no se mantienen las instalaciones de desecación la Marjalería se inundará
La abogada del Coto Arrocero recordó a los vecinos, que la Comunidad de Regantes tiene un serio problema para el mantenimiento de acequias y sistemas de desecación. En este momento está inundada la zona lateral del Cami la Plana, además del área del Bovar, la Molinera y Senillar.
Indicó que "hay que comenzar a urbanizar desde abajo", porque si la Conselleria descubre que hay sótanos que se encuentran ya por debajo de la cota freática en suelo inundable ninguno podrá obtener la cédula de habilitad de las viviendas. Y eso pasa por tomarse en serio los sistemas de drenaje de los terrenos.
El Colector Central sigue en punto 'casi' muerto
Y en lo que se refiera al colector Central de Bovar, Senillar y Molinera, el concejal de Urbanismo repitió un poco lo mismo. No podía expresar en voz alta lo que si rumorean los concejales socialistas por lo bajo con los vecinos, que si el concejal Fernando Navarro, responsable de Transición Ecológica no activa más los bombeos para la desecación del terreno, las soluciones más urgentes resultan inasumibles.
De ahí que el concejal de Urbanismo ya ni se refiera estos sistemas de bombero y aluda solo a cómo deberá repararse el colector de la Marjalería.
Ahora, y según explicó López, resulta que el ayuntamiento tiene que ver cómo está el colector, aunque esa información ya se transmitió al ayuntamiento hace más de cuatro años. Y que las dos soluciones pasan por introducir un tubo dentro de otro tubo… o por realizar un bayPass que evite la zona deteriorada. Sobre el primero, los vecinos de la zona inundada recordaron que dado el deterioro del colector, ese tubo dentro de otro tubo debería ser mucho más pequeño en diámetro y quizá no pudiera soportar el volumen de la filtración de las aguas que han de drenarse por el sistema de desecación, mientras que el By Pass está más que estudiado, sería más rápido y más efectivo.
“Eso lo dirán los técnicos”, zanjó el concejal quien volvió a referirse al problema jurídico de su financiación.
Así, poco a poco los vecinos se fueron yendo. Muchos con la cabeza gacha, otros… con nuevas esperanzas.
El concejal y sus técnicos prometieron repartir sus folletos e informar en nuevas reuniones con cada uno de los colectivos de la Marjalería. Ahora habrá que ver cómo evoluciona todo este procedimiento, que según el concejal de urbanismo no tiene nada que ver con la campaña electoral. “Yo lo que quería y prometí es que todo esto lo iba a hacer hace un año. Pero hasta hace muy poco no hemos podido aprobar todo el Plan General.
