La solución permite que cualquier ciudadano, tenga o no tejado, y sin necesidad de inversión inicial, acceda a los beneficios del autoconsumo
Iberdrola, en su apuesta por la innovación en soluciones energéticas, la sostenibilidad y el compromiso con las zonas en las que está presente, avanza en la instalación de comunidades solares, una solución que permite a los ciudadanos beneficiarse de las ventajas del autoconsumo renovable sin necesidad de contar con una instalación propia ni de realizar inversiones.
Así, los usuarios que accedan a una comunidad solar de Iberdrola pueden reducir su consumo energético hasta un 40%, al mismo tiempo que contribuyen a la transición energética.
Las comunidades solares permiten a los usuarios compartir la energía 100% renovable generada desde una única instalación fotovoltaica, ubicada a un máximo de dos kilómetros de su domicilio. Extremadura, Castilla y León, Cataluña o la Comunitat Valenciana son algunas de las comunidades autónomas donde actualmente Iberdrola cuenta con instalaciones de estas características.
En los últimos meses destaca la puesta en marcha de la primera comunidad solar de València o la de Villanueva de la Serena (Badajoz). Ubicada en el colegio Sagrada Familia Patronato de Juventudes Obreras, la primera comunidad solar valenciana, ofrece a 170 vecinos del barrio de Benimaclet ahorrar en sus facturas de la luz al consumir localmente parte de la energía producida por 233 paneles con una potencia total de 105 kilovatios, suficiente para producir anualmente 146 MWh, lo que evitará la emisión de cerca de 686 toneladas de CO2 a la atmósfera en los próximos 25 años.
Por su parte, la pequeña fotovoltaica instalada en la cubierta de la nave de Electricidad La Serena, ubicada en Villanueva de la Serena (Badajoz), evitará la emisión de cerca de 480 toneladas de CO2 a la atmósfera en los próximos 25 años. En total, 135 vecinos de la localidad podrán acceder a los 160 paneles con una potencia total de 72,8 kW, suficiente para producir anualmente 108 MWh.
En Cataluña, concretamente en Girona, la compañía ha puesto en marcha una instalación consta de 210 paneles con una potencia total de 77 kilovatios (kW), suficiente para producir anualmente 111 MWh y poder dar servicio a más de 130 vecinos.
También en Extremadura, la compañía pondrá próximamente en marcha la primera comunidad solar para un pueblo entero en Cedillo (Cáceres). Los habitantes que quieran unirse en su primera fase a la comunidad energética tienen hasta el 1 de marzo para poder inscribirse tanto presencialmente, en el ayuntamiento, como digitalmente. Gracias a las pequeñas plantas fotovoltaicas instaladas por Iberdrola en dos edificios municipales y en un terreno cedido por el Ayuntamiento, se generará la energía suficiente equivalente al 50% del consumo anual del municipio.
En Valladolid, en los primeros meses de 2023, 80 familias del barrio de las Delicias podrán acceder a los 115 paneles instalados en el colegio Nuestra Señora del Carmen. A través de esta comunidad solar, que cuenta con una potencia total de 52,33 kW, los vecinos evitarán la emisión de cerca de 400 toneladas de CO2 a la atmósfera en los próximos 30 años, al mismo tiempo que ahorran en su factura de la luz.
Recientemente, la compañía también ha informado que instalará su primera comunidad solar en Castellón. La planta fotovoltaica, que dará servicio a 200 vecinos, se ubicará en el tejado de la nave de la Cooperativa Josep Nules y contará con una potencia total de 100 kilovatios (kW), suficiente para producir anualmente 144,4 MWh, lo que evitará la emisión de cerca de 1.675 toneladas de CO2 a la atmósfera en los próximos 25 años.
Y en Alicante, la compañía va a desarrollar la comunidad solar con la asociación de propietarios de viviendas de El Palmeral, que va a permitir a los más de 480 vecinos acceder a la energía 100% renovable generada desde las 12 azoteas, en la que se van a instalar 533 paneles con una potencia total de 246 kW, suficiente para producir anualmente 369 MWh.
Pionera en autoconsumo
En su apuesta por la aceleración de la transición energética y el desarrollo de nuevos productos que permitan mejorar la eficiencia y el ahorro energético, Iberdrola se convirtió en 2015 en la primera empresa de su sector en integrar en su oferta de servicios las soluciones de autoconsumo.
Hoy, ocho años después, Iberdrola se ha consolidado como la compañía de referencia del sector con un incremento del 200% en su cartera de autoconsumo durante 2022. A través de Smart Solar, Iberdrola dispone de servicios para toda la tipología de clientes, desde consumidores domésticos hasta grandes clientes industriales.
Los sistemas solares de autoconsumo pueden suponer un ahorro medio en la factura anual del 30% en el caso de comunidades de vecinos; un 50% para empresa y negocios; y de un 70% en viviendas unifamiliares. Este ahorro se produce por una triple vía: la energía producida por la instalación que el usuario no tiene que comprar, la compensación por los excedentes de energía no consumida, que es vertida a la red, y el ahorro por menores impuestos.
En cuanto a la posibilidad de compensar la energía vertida a la red, los clientes de Iberdrola no cuentan con ningún tipo de suelo para su valoración, de forma que su factura puede llegar a ser de cero euros. Además, cuenta con el servicio Solar Cloud, que permite en el caso de que aún queden excedentes derivarlos para el consumo en otra residencia.