Gracias, gracias y mil veces gracias. Presentar el proyecto de ciudad y la candidatura del PP frente a las 1.200 personas que llenaban el pasado lunes el Auditorio y Palacio de Congresos de Castellón fue una descarga de energía positiva inmensa para afrontar la campaña que acabamos de empezar. Y hacerlo al lado de un presidente de Gobierno como Mariano Rajoy ya es insuperable. Como dije en mi discurso y como reflejan hechos como el vivido esta semana, la ‘marea azul’ es imparable. Los castellonenses tienen cada vez más claro que deben dejar atrás el sectarismo y apostar por el cambio, una opción que solo garantiza el voto útil, el voto al Partido Popular. Y esto lo sentimos en las calles, en las asociaciones de vecinos, en nuestros recorridos por todos y cada uno de los barrios de la ciudad. Pero también en nuestras reuniones con entidades del tercer sector, los colegios profesionales… Porque a nosotros nos gusta el cara a cara, la atención a aquellos que tienen algo que decir.
Lo hacemos en nuestro día a día, no solo cuando se acercan las elecciones. Y lo hacemos orgullosos cuando recibimos la visita de compañeros del Partido Popular, como, en este caso, el presidente Rajoy. Fue emocionante ver como, durante el paseo por el centro previo a la presentación, personas de todas las edades y condiciones se le acercaban a pedirle una fotografía o, simplemente, a saludarle. Todos y cada uno de ellos tuvieron su momento con él. Al día siguiente, otro presidente del Gobierno, en este caso el socialista Pedro Sánchez, no pudo hacer lo mismo. Ni siquiera lo intentó, y se escondió entre los muros del Palau de la Festa. Y es que a ellos, todo lo que amenace con la divergencia y la libertad de expresión les asusta. Esto demuestra, de nuevo, que el próximo 28 de mayo los castellonenses debemos elegir entre dos opciones claras, el sanchismo que representa el PSOE de Amparo Marco o la libertad del Partido Popular.
Entre todos vamos a volver a teñir de azul Castellón, la Comunidad Valenciana y España. Entre todos, Castellón ejercerá el liderazgo que le corresponde, que jamás hubiera tenido que perder pero que el inmobilismo de quienes han gobernado nuestra ciudad en los últimos 8 años, ha borrado. Hemos de ser ambiciosos, pensar en grande y sentirnos orgullosos de quiénes somos para situarnos en el mapa de las oportunidades. Con el PP en el Ayuntamiento, en la Diputación, en Generalitat y, en unos meses, en la Moncloa, volveremos a ser la capital, el punto de referencia de los vecinos de toda la provincia. El lugar donde emprender, donde invertir y donde crear empleo.
Es la hora de Castellón. Es la hora de poner fin a los bandos y al sectarismo. Es la hora de trabajar en serio, con un equipo de hombres y mujeres preparados, que vienen a servir y no a vivir de la política. Comprometidos con la ciudad e ilusionados con ser protagonistas de la transformación que Castellón necesita. A ellos, a mi equipo, del primero de la lista al último, también les doy las gracias por haberse sumado al equipo del cambio. La cuenta atrás ya está en marcha.
