Durante un año, falsificó la contabilidad, cobró más de la cuenta a los clientes y se quedó con las diferencias y parte de los tratamientos de pago aplazado
La Audiencia Provincial de Castellón ha condenado a la ex-empleada de una odontóloga por apropiarse indebidamente de dinero procedente de la consulta para la que trabajaba.
Los hechos sucedieron a lo largo del 2017. La condenada trabajaba como auxiliar en una clínica de odontología. Allí tenía funciones como la de cobrar a los clientes los tratamientos que se les practicaban.
A lo largo de aquel tiempo, la titular de la consulta apreció diversas irregulares contables. Según los 'hechos probados' de la sentencia, unas veces cobraba de más a los clientes, y se quedaba con la diferencia; otras se quedaba con parte de los pagos aplazados de tratamientos. Para ello, intentaba que los clientes pagaran en metálico, e incluso les emitía un certificado de recibo en los que simulaba la firma de la titular de la clínica.
Llegó un momento, en que algunos clientes afirmaban haber pagado tratamientos completos que, ni figuraban así en los asientos contables de la clínica. Las cuentas no cuadraban y finalmente la titular de la clínica se encaró con su empleada, que reconoció haberse quedado con algo del dinero hasta una cantidad de 1.100 euros.
La odontóloga despidió a su empleada en diciembre de 2017 y la denunció ante la justicia en el mes de junio.
EL Juzgado de Instrucción de Nules investió los hechos y finalmente los elevó a juicio oral, que se celebró en la Audiencia Provincial de Castellón. Según los datos que constan en los 'hechos probados', la cantidad que se habría apropiado la ex empleada podría haber superado los 27.000 euros.
La audiencia ha condenado a esta ex-empleada como autora de un delito de apropiaciación indebida, a la pena de 21 meses de prisión y a abonar a la clínica perjudicada una indemnización de 15.000 euros. 2000 euros en el plazo de un mes desde la publicación de la sentencia y 13.000 euros en un plazo de 24 meses.
