Impulsar Almassora como foco de atracción empresarial es uno de los objetivos de este equipo de gobierno que lidero. Almassora tiene superficie industrial suficiente para seguir creciendo, un tejido económico sólido capaz de generar nuevas oportunidades y está en un lugar estratégico gracias a sus buenas conexiones.
Para ello, desde el Ayuntamiento queremos contar con la colaboración estrecha de las entidades e instituciones que más conocen los pormenores económicos de la provincia, como es el caso de la Cámara de Comercio de Castellón. Ya me he reunido con su presidenta, Lola Guillamón, a la que agradezco que el otro día visitará el consistorio para tener un primer contacto cara a unir sinergias que nos permitan resituar en el mapa económico a Almassora.
Apostamos por la formación adaptada a las necesidades de la industria, mejorando así la empleabilidad; el asesoramiento empresarial para impulsar el emprendimiento a través de nuevos proyectos; la digitalización de nuestro comercio o la internacionalización de nuestras empresas con el claro fin de ganar en competitividad.
El Ayuntamiento es la administración más cercana al ciudadano y debe velar por su bienestar y calidad de vida y, para ello, el empleo es la piedra angular.
Si hablamos de economía, sabemos que la industria cerámica tiene un peso más que relevante en el cómputo global, pero no olvidamos la importancia que también tienen el resto de sectores. Los agentes económicos deben saber que en este Ayuntamiento encontrarán siempre un aliado si se quiere seguir creciendo, dando protagonismo a la innovación, la tecnología y la sostenibilidad, con el propósito de construir nuevas oportunidades de futuro.
