El equipo de gobierno se ha reunido con más de 200 vecinos para explicar cómo quedará el proyecto antes de aprobarlo y recoger sus sugerencias
El proyecto de la Zona de Bajas Emisiones de Castelló tendrá una prórroga de ejecución hasta finales de 2024. La modificación del proyecto original mantendrá el tráfico en todas las calles y solo se restringirá puntual y temporalmente si suben los niveles de ruido o contaminación del aire. Más de 200 vecinos han acudido a la llamada del equipo de gobierno para poder conocer los cambios y expresar sus sugerencias
La Zona de Bajas Emisiones de la capital de la Plana seguirá adelante, pero con algunos cambios.
La alcaldesa de Castellón y miembros del equipo de gobierno han mantenido dos reuniones con los vecinos de Castellón afectados por la Zona de Bajas Emisiones de 745.000 metros cuadrados aprobada por el gobierno anterior. En ambas ocasiones el salón de plenos estaba a reventar. En total, más de 200 personas y muchas sugerencias, propuestas y preguntas.
Proyecto original aprobado en la anterior legislatura
Máxima participación ciudadana
A las 19:00 horas estaban convocados los vecinos de la zona norte, y a las 20:00 horas los de la zona sur… pero la primera se ha retrasado por las preguntas y la segunda también ha generado muchos interrogantes y se ha prolongado en el tiempo.
Los vecinos tenían ganas de saber, y una vez que han podido tomar la palabra, preguntar, pedir explicaciones, y hablar con la alcaldesa. ¿Cómo quedará mi calle?, se preguntaban, y al tiempo ofrecieron también muchos datos, alternativas, preocupaciones...
Informar a los vecinos antes de aprobar el nuevo proyecto
El objetivo de ambas reuniones ha sido el de informar a los vecinos afectados de las modificaciones introducidas en el proyecto y poder tener en cuenta sus opiniones antes de ultimar los detalles y pasarlo definitivamente a aprobación.
Cumplir con el mandato de Europa pero 'con sentido común' y la participación de los vecinos
En líneas generales, y como ha explicado la alcaldesa, el tema es el siguiente: Europa obliga a las ciudades de más de 50.000 habitantes a crear una Zona de Bajas Emisiones en el centro de los municipios. Pero las directrices europeas no especifican ni cómo ni cuánto.
El propósito de la directiva es el de mejorar el aire de las ciudades y favorecer la eliminación de ruidos.
Y en esos dos detalles se ha centrado el equipo de gobierno y el estudio realizado desde el pasado mes de junio. Los datos relativos a la calidad del aire de Castellón señalan que toda la ciudad y sus calles se encuentran con niveles mucho más bajos de los máximos exigidos. "Castellón no es ni Madrid ni Barcelona"
Zonas sensibles por ruido
En cuanto al volumen de ruido, en principio tampoco se rozan los máximos, pero habría tres zonas que requieren más atención que el resto: Plaza Clavé, Calle Navarra y Calle Herrero.
Vistos los resultados, la modificación de la ZBE contempla: una actuación en las zonas afectadas por el proyecto adjudicado por el ayuntamiento en la última Junta de Gobierno, dos días antes de elecciones.
Aquí señalaba la alcaldesa, Castellón están en juego los millones de euros de los fondos europeos y el futuro de la ciudad. Como la obra ya estaba adjudicada, no realizar el proyecto supone la devolución del dinero a Europa y una indemnización a la empresa adjudicataria.
Detalles del nuevo proyecto: eliminación de aceras
Ahora bien, en función de los datos de calidad del aire y del ruido, lo que se propone es: Una intervención de obra en todas esas calles para eliminar aceras, dejar toda la calzada al mismo nivel, respetar la mayor parte de aparcamientos en lo que se pueda; y, sobre todo, generar zonas verdes con arbolado o jardineras, y con bancos, juegos y áreas sociales.
Bancos cómodos y con respaldos
Todos los vecinos han coincidido en lo mismo: no quieren bancos como los de la avenida de Lidón, ni como los de la plaza de la Paz que acumulan agua y no son aptos para las personas mayores, porque no tienen respaldos.
Tráfico en todas las calles
Se mantendrá el tráfico en todas las calles dentro de la Zona de Bajas Emisiones. El objetivo es no multar, ha dicho la alcaldesa. Acabar cuanto antes con las multas, pero sí controlar el tráfico para que se respeten las ordenanzas de cada zona.
Habrá modificaciones sobre el proyecto original en Plaza Clavé, Arrufat Alonso, calle Herrero… o 9 de marzo.
Pero ¡ojo!, al tiempo que la ciudad mantiene el tránsito en todas esas vías, también dispondrá de nuevos materiales de construcción como asfalto fono-absorbente, para reducir el ruido. Además, establecerá un procedimiento de restricciones graduales y temporales, que entrarían en vigor, en el caso de que se supere en algún momento el nivel de ruido permisible o baje la calidad del aire.
Restricciones puntuales y temporales si sube el nivel de ruido
Estas restricciones, en caso de tener que aplicarse, comenzarían con el cierre al tráfico para vehículos de más de 20 años de los tramos afectados por esos niveles, y solo durante el tiempo en que los datos recogidos señalen la necesidad. Las restricciones no afectarán a los vecinos que vivan en esa calle.
Aparcamientos
En cuanto a aparcamientos, la zona que más va a notar la reducción será la norte, y, concretamente áreas como el Rabal de San Félix. Lo estrecho de algunas calles no permite otras alternativas…
Pero a cambio se crearán otras zonas de aparcamiento ‘verde’ restringidas a los vecinos de la zona afectada. También se trabajará en la creación de aparcamientos disuasorios, y acceso gratuito a lanzaderas y autobuses que los conecten con sus zonas de residencia.
En total, indicaba el concejal Sergio Toledo, el proyecto original reducía prácticamente a cero los aparcamientos de la ZBE. El nuevo proyecto logra recuperar en torno a 200, pero en las zonas donde se pueda llevar a cabo.
El resultado de la reunión ha sido satisfactorio para todas las partes. Los técnicos no han parado de dar explicaciones y comentar los detalles, y los vecinos se mostraron contentos, porque por fin podían hablar del tema con el ayuntamiento.