"Si pasamos el envite actual, Castellón se situará otra vez en la vanguardia de las provincias españolas en creación de empleo y riqueza"
Luis Martí es presidente de la Confederación Empresarial de la Comunitat Valenciana en Castellón desde febrero de 2022. Procede de la asociación de turismo y hostelería (Ashotur). La CEV acaba de lanzar una manifiesto junto a agentes de la sociedad civil por la economía de la provincia. Aboga por impulsar un plan de reindustrialización en Castelló que refuerce el actual modelo económico. La entrevista se realiza en la sede de la CEV.
PREGUNTA: ¿Cómo afronta Castellón el contexto de crisis energética, inflación y guerra de Ucrania?
RESPUESTA: La crisis energética alcanzó su punto álgido en febrero de 2022 con el inicio de la Guerra de Ucrania, aunque en 2021 ya había empezado a crecer el precio energético. Desde el comienzo de la Guerra de Ucrania el coste energético se ha multiplicado por 4. En las empresas del sector cerámico se calcula un sobrecoste de más de 2.000 millones de euros. Se trata de una crisis que ha golpeado duramente a la cerámica, lo que condiciona a la economía de Castellón. Aquí tenemos un ecosistema en el que el sector industrial representa el 36 % del PIB. La crisis energética primero impactó en las empresas de la cerámica. Las afecciones en este sector se extendieron luego a otras actividades de Castellón excepto el químico y el turístico.
Tras la crisis energética, hemos tenido una crisis provocada por la inflación. Y ahora tenemos una crisis con la subida de tipos de interés. Para frenar la inflación se aumentó el tipo de interés, lo que ha encarecido el dinero a las empresas en un momento en el que necesitan dinero, y también encarece los préstamos a los ciudadanos.
"España quiere ser una locomotora industrial. Si perdemos ese tren podemos convertirnos en un parque temático"
Así, tenemos un mercado laboral a la baja, con una tasa de paro superior a la media autonómica y nacional. Castellón llegó a tener pleno empleo en su momento por el peso del sector industrial. La renta per cápita es asimismo inferior a la de la Comunidad Valenciana y española y europea. En definitiva, nos encontramos en una situación complicada.
Este contexto ha provocado que en los cítricos hayan cerrado dos cooperativas con 1.400 trabajadores, mientras en la cerámica se han perdido 1.400 empleos y 1.500 trabajadores están en ERTE. Así, 4.000 puestos de trabajo se han perdido en un año solo en la cerámica y el sector citrícola.
P: Ahora hay una apuesta de diferentes Administraciones por la reiundustrialización. ¿Castellón puede ser un ejemplo al respecto?
R: En el manifiesto por la economía de Castellón que hemos presentado contemplamos un análisis realista. Si hemos sido la locomotora de la Comunitat Valenciana con una tasa del 36 % de PIB industrial, podemos elevarla incluso. Si pasamos el envite actual, Castellón se situará otra vez a la vanguardia de las provincias españolas en creación de empleo y riqueza.
P: ¿Qué retos afronta la provincia?
R: Uno, mantener la tasa del PIB industrial y que no se produzca destrucción ni deslocalización del tejido productivo. Un segundo objetivo sería el de abordar el problema de la despoblación, un 80 % del territorio está en riesgo de ello. Y tercero, el sector turístico tiene una capacidad de crecimiento con un modelo propio que no sea igual que otras provincias.
Hemos impulsado un manifiesto por la economía de Castellón. Es un compromiso, una alianza de toda la sociedad por el futuro de la provincia. Es una reivindicación de lo que significa que Castellón tenga un 36 % de PIB industrial. En Alemania o Francia hay planes de reindustrialización y en España reclamamos uno. Aquellos países más industrializados tienen una mayor renta per cápita, más calidad de vida y creación de empleo con valor añadido. Por ello, queremos seguir por esa senda. Cuando se habla de diversificar la economía nos preguntamos cómo se hace eso y por qué tenemos que renunciar a una provincia industrializada. ¿Eso es malo? Es más bien lo contrario. Castellón tiene una variedad de sectores que consolida una economía, si ya la tenemos no hemos de cambiar el modelo, sino fortalecerlo. Hemos sido la envidia España. Regiones de Europa o los landers de Alemania aspiran al 36 % del PIB industrial que tiene Castellón.
P: ¿Haría falta un plan de rescate en el sector cerámico?
R: El plan de reindustrialización en Castellón comenzaría en abordar la problemática de la cerámica y establecer un plan para paliar los daños sufridos por una crisis de la que el sector no es responsable. En la crisis financiera pasada se ayudó a unas empresas que causaron su crisis. La cerámica no ha creado su crisis, ha venido por una coyuntura geopolítica internacional. Hay que destacar que la cerámica ha nacido a pulmón, nunca ha necesitado ayudas públicas en otras coyunturas. Toda la innovación y empleo se han hecho con recursos privados. En las actuales circunstancias, defendemos un plan de ayudas para al sector para afrontar una situación sobrevenida.
"La cerámica no ha creado su crisis, ha venido por una coyuntura geopolítica internacional. Necesita un plan de ayudas para afrontar una situación sobrevenida"
P: Además de la cerámica, ¿por qué otros sectores debería apostar Castellón?
R: El sector energético y químico tienen recorrido, así como el aeroespacial que se vertebra en torno al aeropuerto, y el sector turístico. También hay que mantener el agrario. El año pasado el Instituto Valenciano de Estudios Económicos presentó un documento económico que apuesta por recuperar la vía valenciana, centrada en tres ejes: industria, exportación y agricultura. Precisamente, ejes en los que Castellón ha sido pionera.
P: ¿Debe continuar la figura de los ERTEs?
R: Sí, es una figura que ha venido para quedarse. En el Covid el ERTE fue una de las grandes tablas de salvación de las empresas. Sin los ERTEs, en el sector turístico habría caído un 30 % de su tejido productivo.
Ahora bien, en los ERTEs que se ejecutan ahora en la industria cerámica el trabajador consume el paro. Y es un problema. En el Covid fueron buenos porque no se utilizaba la prestación. Pero si en un ERTE consumes el paro cuando te vas de la empresa ya no lo tienes. El ERTE se modificó tras el Covid, pero la cerámica vive en estos momentos su propia pandemia.
"Sin los ERTEs, en el sector turístico habría caído un 30 % de negocios. Pero en el ERTE actual en la cerámica el trabajador consume el paro, y es un problema. La cerámica vive ahora su particular pandemia"
P: ¿La reforma laboral está teniendo un impacto positivo?
R: La reforma laboral fue fruto de un consenso. Cuando una ley de esta envergadura es fruto del acuerdo no se recogen todos los aspectos que uno quisiera. Para la patronal, hay cosas mejorables, pero también las hay para el Gobierno, que quería ir más lejos. El consenso hizo que la reforma no fuera tan invasiva en la libertad empresarial. Conseguimos un equilibrio positivo.
P: ¿Qué valoración hace de la actual situación política nacional?
R: Un absoluto desastre. No por una cuestión política e ideología, sino porque llevamos meses sin gobierno, meses en los que la economía hubiera necesitado decisiones valientes, no tomadas porque el Gobierno está en funciones. Y vamos hacia una situación de bastante inestabilidad. Si hay un gobierno deberá ser apoyado por siete partidos diferentes. Y si no hay, habrá otras elecciones, con un resultado que puede ser el mismo. El impulso del Gobierno ¿para cuándo queda?
Por otro lado, tener partidos nacionalistas de otras autonomías que piden ventajas económicas frente a otros territorios sin partidos nacionalistas fuertes es una debilidad para nosotros. Un ejemplo es la petición de ERC y Junts de paralizar la ampliación del puerto de València. Para nosotros es una barbaridad, porque es una infraestructura de futuro y progreso, teniendo en cuenta que la cerámica es uno de los principales clientes del puerto.
La inestabilidad política es mala para la seguridad jurídica y, por tanto, para la creación de riqueza.
"La actual situación política es un desastre. Una gran coalición entre los grandes partidos sería la solución para generar estabilidad y confianza"
P. ¿Defiende una gran coalición?
R: Sin lugar a dudas. Sería la solución para generar estabilidad y confianza. Una gran coalición entre los dos grandes partidos visualizaría que somos un país fiable en el que se puede invertir.
P: ¿Qué medidas económicas necesita España?
R: Primero, pediría que se desbloquearan los fondos europeos y que hubiera un plan de reindustrialización de futuro del país. España quiere ser una locomotora industrial, porque si perdemos ese tren podemos convertirnos en un parque temático. Y los parques temáticos solo son buenos cuando se crean exnovo.
P: ¿Cuándo prevé la patronal regresar al Edificio Sindical?
R: Volveremos cuando podamos. El Edificio Sindical es la sede natural de la patronal, un inmueble cuyo uso está afecto a sindicatos y patronal. También queremos agradecer al puerto de Castellón nuestra actual ubicación.