Le propinó varios puñetazos en el rostro y una patada en la cabeza cuando ya había caído al suelo
La Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Castellón juzgará el lunes a un hombre por la paliza que dejó casi ciego de un ojo a su víctima. Todo comenzó cuando la mujer del agredido llamó la atención a unos niños.
Los hechos ocurrieron sobre las 17.30 horas del 16 de diciembre de 2020, en un bar
ubicado en el Grao de Castellón, cuando el acusado, según sostiene la Fiscalía en su escrito de conclusiones provisionales, propinó varios puñetazos en el rostro y una patada en la cabeza después de que cayera al suelo desestabilizado por los golpes.
La agresión se produjo cuando la víctima salió en defensa de su mujer, quien había sido increpada por el procesado, después de que hubiera llamado la atención a su hijo y otros niños.
La Fiscalía solicita inicialmente una pena de siete años de prisión por estos hechos, que califica como delito de lesiones agravadas, y una indemnización de más de 70.000 euros para el perjudicado.
