La entidad vila-realense celebra su 101º aniversario con un impresionante triunfo en el Benito Villamarín
El Villarreal volteó el marcador y se adjudicó tres puntos de oro en el Benito Villamarín. Los groguets doblegaron al Real Betis en un auténtico partidazo en el que se adelantaron los béticos hasta en dos ocasiones, pero en el que la contienda se decantó a favor del Submarino, que continúa con su escalada liguera. Ya van ocho partidos invictos en LALIGA EA Sports. Tres victorias consecutivas en el campeonato doméstico.
Tras la derrota continental en Marsella, el Submarino aterrizó en el Benito Villamarín con el propósito de olvidar la competición europea y volver a la dinámica liguera, donde los groguets acumulaban hasta siete encuentros sin perder.
El Real Betis entró al duelo con intensidad y mucha presencia en campo contrario. En los primeros compases sometieron al Submarino, que fue estirándose a medida que avanzaba la primera mitad.
Cuando se igualaban las fuerzas sobre el terreno de juego, el Real Betis desequilibró el luminoso del Benito Villamarín. En el minuto 30, Guido Rodríguez adelantó al Real Betis rematando en el interior del área pequeña el esférico, cedido por Willian Carvalho con la testa en una jugada de estrategia.
El Submarino reaccionó al tanto bético. Con rapidez, el Villarreal igualó el marcador en el 40’. Gerard Moreno filtró un espectacular pase al espacio para Sorloth, que, cuando ya encaraba a Rui Silva, cedió para que Baena marcara a puerta vacía.
Justo antes del descanso, el Betis asestó un doloroso golpe en forma de gol. Los locales volvieron a tomar ventaja en el marcador en el tiempo de prolongación del primer tiempo por medio de Willian José. El atacante brasileño envió a la red el cuero tras un centro de Pablo Fornals que estuvo a punto de perderse por la línea de fondo.
La segunda parte arrancó con el 2-2 del Villarreal. Los amarillos encontraron el premio del gol gracias a un fantástico centro de Gerard Moreno, que remató en propia portería Sokratis. Minutos después, el Submarino reafirmó su buen arranque con una nueva ocasión de gol. El propio Gerard Moreno se topó con Rui Silva minutos después tras un pase al segundo palo de Álex Baena.
El partido se convertía cada vez más en un correcalles. En el minuto 66, Jorgensen salvó al conjunto de Marcelino con un paradón bárbaro sobre Nabil Fekir. Tras la intervención del guardameta danés, el Villarreal inició una transición rápida, conducida por Gerard, que cedió para que Alex Sorloth fusilara a Rui Silva y convirtiese el 2-3.
Solo cuatro minutos después, el colegiado Hernández Hernández expulsó a Alberto Moreno y Chimy Ávila por una disputa. Ambos equipos se quedaban con 10 hombres en el Benito Villamarín. Ante esta nueva situación, Marcelino introdujo un triple cambio para refrescar al equipo e intentar administrar la ventaja en el marcador. Cuenca, Coquelin y Ilias Akhomach entraron en sustitución de Gerard, Traoré y Baena.
En los últimos compases, entró al terreno de juego Capoue por Comesaña y Mosquera por Kiko en busca de más frescura y pulmones en el Submarino. Los minutos pesaban en ambos equipos y el Villarreal debía administrar la valiosa renta en un escenario tan difícil como el Benito Villamarín. Con buen hacer defensivo y mucho oficio, los groguets se llevaron una valiosa victoria en un campo de mucho prestigio.
