Los barcos participantes sueltan amarras con el parte meteorológico en la mano y muchas ganas de repetir su experiencia en Castellón
La última jornada de Escala a Castelló ha sido tan intensa como el fin de semana. Colegios, niños, personas con discapacidad, asociaciones de mayores… todos ellos han disfrutado de la gran fiesta del mar. Ellos y los muchos que todavía han apurado hasta el último minuto para que nadie se lo cuente. Los barcos soltaban amarras con el parte meteorológico en la mano. Algunos partieron ya por la mañana, otros miran preocupados hacia el norte, y los hay que se plantean prolongar la estancia hasta que el viento y el mar sean los mejores.
La VII edición de Escala a Castelló cerraba sus puertas con un éxito absoluto de público que, a falta de los datos oficiales puede haber superado y mucho los 100.000 visitantes.
La última jornada no ha tenido nada que lamentar en cuanto a ambiente y asistencia con respecto a los días anteriores.
Hoy era un día muy especial. Aunque los niños de la capital de la Plana volvían ya al colegio, los de la mayor parte de la provincia todavía tenía un día más de vacaciones.
La razón es que cuando se elabora el calendario escolar, en el caso de la capital, siempre se coge este día de Sant Vicent, para conseguir una fiesta completa en las fiestas de la Magdalena que se celebran en torno al tercer domingo de cuaresma. Todos los centros escolares tienen los mismos días de clase, por lo tanto, el día que se añade a otras fechas hay que quitarlo de algún sitio, y en Castellón se ha cobrado el día de Sant Vicent.
Con todo, el recinto de Escala a Castelló se ha llenado de gritos infantiles. Más de 300 niños de cinco colegios de Castelló y un instituto habían programado su visita oficial al gran parque temático del frontal marítimo.
Pero también había niños de otros colegios de Valencia y de otros municipios de la provincia. Imagine el lector la algarabía que se ha montado en el muelle de Costa y en el Muelle de Poniente.
Y con qué emoción han subido a bordo de los barcos, se han sentido navegantes y hasta piratas de todos los mares, con los ojos llenos de curiosidad ante todo lo que veían.
Y no solo había niños. Hoy también se quería dedicar el día a las personas mayores y a las personas con discapacidad, para que tuvieran la oportunidad de visitar los barcos, las zonas temáticas, los mercados… todo eso que estos días se llenaba a reventar.
Entre ellos, 30 personas de Frater, invitadas por la concejalía de Bienestar Social.
Y pese a que la mayoría de las familias de la capital intentaban hoy retomar su actividad normal, después de Semana Santa y Pascua, todavía había visitantes de todas las edades y de todas las procedencias que apuraba hasta el último minuto para subir a los barcos y sellar su pasaporte náutico.
Conclusión, que la VII edición de Escala a Castelló ha sido un éxito rotundo, de principio a fin.
Aunque algunos barcos sean los mismos que ya han visitado antes la ciudad de Castellón, las naves, como las personas, también cambian y aportan nuevas experiencias en cada una de sus estancias. La gente lo sabía, y por ello, este año se buscaban nuevos detalles, nuevos rincones, conocer más de todos esos barcos históricos y de seguridad. Y de paso, por supuesto sellar el pasaporte que garantizará a propios y extraños, que ellos si subieron a todos los buques de escala a Castelló.
Soplador de vidrio
Impresionantes algunas de las actividades desarrolladas en el muelle de levante o el muelle de Costa, como el 'soplador de vidrio' que tuvo a bien dedicar una de sus últimas actuaciones a Castellón Información.
No solo Escala, también los comerciantes y restaurantes del Grau estaban más que contentos. Comer en el Grau durante los últimos días no era una tarea fácil. Colas, como en los barcos, delante de algunos restaurantes. Mientras los comercios del Grau se han vestido del mar que conocen para transmitir también la mejor imagen marinera.
Y por qué no, también toda la provincia a través de Castelló Ruta del Sabor.
Si Escala a Castelló va bien para la capital de la Plana, den por descontado que también se convierte en una ventana única, internacional, para toda la provincia de Castellón.
Los barcos sueltan amarras
Marcharse de Escala a Castelló, soltar amarras, no ha sido fácil para ninguno de los participantes. Con caras serias y el parte meteorológico en la mano, los capitanes establecían sus estrategias porque la cosa no pinta bien para los que se dirigían al norte de la península.
Así lo pensó el Morgenster (La estrella de la mañana), que ha sido el primero en zarpar. Lo hacía a las nueve de la mañana para aprovechar el día, la luz, y en lo posible el estado del mar antes de que llegue la tormenta.
Los barcos que naveguen hacia el sur parece que lo van a tener más sencillo… o eso es lo que se espera. El frente que entraba hoy por el oeste de la península parecía serio. Las borrascas giran en sentido inverso a las agujas del reloj (en el hemisferio norte) y alteraciones como la esperada suele trasladarse hacia el este… a su paso pueden desgastarse o no, pueden variar de rumbo… pero si entra aire frío de altura y choca con la humedad y las altas temperaturas del Mediterráneo el resultado suele derivar en la formación de una Dana…
Con todas estas razones, al mediodía los barco se preparaban para zarpar… levantaban el ancla, soltaban los cabos de amarre y poco a poco salían del Puerto de Castellón. entre ellos, una despedida al son de las bocinas.
Satisfacción en el Ayuntamiento
Durante su visita a Escala a Castelló, la alcaldesa ha explicado que “Escala a Castelló es un evento plural para que puedan disfrutar desde los más pequeños hasta los más mayores, incluyendo a las personas con algún tipo de discapacidad. Estamos orgullosos del resultado porque a pesar de ser un día laborable ha habido mucha afluencia de público, lo que supone un gran revulsivo económico para el Grao”.
Además, la primera edil ha celebrado que “esta fiesta del mar ha tenido repercusión en los comercios del Grao, a través de algunas de las novedades que se han puesto en marcha este año como el mercadillo ‘Comerços a la Mar’ o con menús especiales en restaurantes, que han ayudado a ensalzar la gastronomía grauera”.
Por su parte, la concejal de Turismo ha explicado que “el día de hoy ha sido una grandísima oportunidad para enseñar a los visitantes las riquezas del Grao, poniendo en valor cuestiones como la riqueza gastronomía, la calidad de nuestro comercio local o los grandes atractivos nuestras playas con los servicios operativos desde Semana Santa. Sin duda, este es el camino para desestacionalizar el turismo”.
