Ignasi Garcia, portavoz de Compromís, no se opone a esta contratación si se destina exclusivamente a promover el comercio local
El Ayuntamiento de Castelló ha sacado a licitación el contrato del servicio de creación, implementación y gestión de una estrategia de comunicación y contenidos en las redes sociales de la Concejalía de Comercio y Consumo del Ayuntamiento de Castelló de la Plana. Un contrato con una duración de dos años (más una posible prórroga de un año) por valor de 105.000 euros, lo que se traduce en 42.350 euros (IVA incluido).
Compromís ha anunciado que estará "vigilante respecto al uso del nuevo community manager contratado por la Concejalía de Comercio, quien percibirá un salario anual de 42.350 euros". Según explica Ignasi Garcia, portavoz de Compromís en el Ayuntamiento de Castelló, el grupo municipal no se opone a esta contratación si se destina exclusivamente a promover el comercio local y a acercar a la ciudadanía todo lo que este puede ofrecer.
"Es fundamental que Castelló cuente con herramientas para potenciar su comercio local, que es un motor económico y social para la ciudad. Si este community manager se dedica a esta tarea, no tendremos ningún problema", afirmó Garcia.
No obstante, el portavoz de Compromís señaló que estarán atentos para asegurarse de que este recurso público no se utilice para otras finalidades. "Si comprobamos que el profesional contratado se dedica a difundir ocurrencias sectarias, patrióticas o propagandísticas como las de los Tercios de Flandes, el Día de la Suegra o la promoción personal del concejal de Comercio, no dudaremos en criticarlo y exigir responsabilidades", advirtió.
Compromís destacó la importancia de gestionar los recursos públicos con responsabilidad y transparencia. "El dinero de la ciudadanía debe destinarse a acciones que realmente beneficien a la ciudad y al comercio local, no a alimentar ocurrencias ni estrategias de propaganda partidista", subrayó Garcia.
La formación reiteró su compromiso con el apoyo al comercio local y aseguró que hará un seguimiento riguroso de la actividad de la Concejalía de Comercio para garantizar que se prioricen las necesidades reales del sector.