La medida estudiará la flora y fauna del espacio para garantizar su correcto funcionamiento y el cuidado de este entorno natural
El pulmón verde más importante de la ciudad de Castelló, el parque Ribalta, contará con un plan específico para su gestión. Una medida con la que el Ayuntamiento pretende garantizar su correcto funcionamiento y el cuidado de este entorno natural, que sin duda se trata de uno de los espacios verdes más preciados de la capital de la Plana.
Así lo ha asegurado el concejal de Medio Ambiente, Cristian Ramírez, quien ha matizado que “aunque no hemos detectado carencias ni deficiencias importantes en este espacio, de hecho en el último año tan solo se han retirado alrededor de cinco árboles, queremos cuidarlo porque es muy antiguo”.
En este sentido, el edil del área ha puesto en valor la importancia de este parque ubicado en zona urbana, que cuenta con ejemplares monumentales, y ha insistido en que “tenemos que estar pendientes porque los árboles tienen muchos años”. Y, para ello, expertos en botánica y zonas verdes realizarán un exhaustivo análisis de todo el recinto para proponer medidas que mejoren este emblemático espacio por el que cada día pasan cientos de castellonenses.
Esta acción está enmarcada dentro del nuevo contrato de mantenimiento de la jardinería y zonas verdes del casco urbano de la ciudad, que entró en vigor hace tan solo unos días y que ha sido adjudicado a la compañía Centre Verd por un importe que asciende a los 29,1 millones de euros durante cuatro años.
En este sentido, será la empresa adjudicataria la encargada de ejecutar el plan de gestión del parque Ribalta, que consistirá en el análisis tanto de la flora como de la fauna. “Se estudiarán los árboles existentes, las distintas especies y la fauna y, partir de este estudio, se establecerá qué tipo de arbolado se mantiene, qué ejemplares se eliminan y las nuevas plantaciones que se recomiendan”, explica Ramírez.
La acción supone una de las 24 mejoras propuestas por la empresa que gestiona actualmente el mantenimiento de las zonas verdes de la ciudad, que cuenta con una inversión adicional de 1,1 millones. Una lista de la que también forma parte el acondicionamiento de la jardinería en el camí La Plana, la mejora del parque del Auditorio o la instalación en el Pont de Ferro de un sistema riego tele gestionado con sensores de humedad para reducir hasta un 30% de agua.