La excavación de vías de evacuación de agua en la arena de las playas urbanas, así como la limpieza de barrancos e imbornales, han contribuido a evitar inundaciones.
Castellón Información
Tras las intensas precipitaciones del fin de semana y el temporal marítimo que ha azotado la localidad durante los últimos dos días, la concejalía de Servicios ha comprobado el estado de barrancos, ramblas, viales y playas, con el objetivo de valorar posibles incidencias y daños y comprobar la efectividad de las tareas de prevención rutinarias y de urgencia que se han llevado a cabo al inicio del otoño y también durante el fin de semana.
El balance ha sido positivo ya que “no se han producido inundaciones sustanciales en las zonas que históricamente han sufrido más esta problemática” ha valorado la concejala del área, Lupe Roig.
Las últimas instalaciones de muretes, sistemas dunares, bombas de achique de agua, y la intensa tarea de limpieza de imbornales de las avenidas Papa Luna y Akra Leuke así como la de los barrancos que se lleva a cabo de forma rutinaria antes de la llegada de las lluvias, han sido de gran utilidad para evitar las recurrentes inundaciones, sobretodo en la zona norte de la costa del municipio.
El retroceso de la arena de las playas ha sido importante debido a la intensidad del temporal marítimo, pero la regeneración natural ya se ha dejado ver apenas unas horas después.
“La empresa concesionaria de la limpieza de las playas el mismo viernes comenzó, además, a realizar excavaciones en la arena para crear canales de desagüe para evitar así que el temporal alcanzase los paseos marítimos” ha explicado Roig al alcalde durante la ronda de supervisión a las playas, en la que han podido comprobar la efectividad de las tareas realizadas de urgencia. Concretamente este trabajo se realizó en varios puntos de la Playa Norte y en la Playa Sur, al término del antiguo cauce del río, “ lo que ha garantizado que el temporal marítimo no haya alcanzado viviendas ni paseos”, ha constatado el primer edil.
El temporal en Morella
La ciudad de Morella, al igual que en el resto de municipios dels Ports, ha vivido un fin de semana de intensas lluvias que dejaban en la localidad un total de 143,6 litros por metro cuadrado en los últimos 4 días, superando los 200 litros en algunos lugares del término municipal. El pasado jueves se iniciaba este temporal con una precipitación de poco más de 5 l/m2, los siguientes días serían los de mayor intensidad de lluvia, superando los 45 l/m2 viernes, sábado y domingo. Según los responsables de la estación meteorológica, estos datos, siendo importantes no han supuesto ningún récord.
La buena noticia es que no hay que destacar ninguna incidencia grave en todo el fin de semana. Además, estas lluvias, tanto por la cantidad como por la forma, han sido muy beneficiosas para el campo y para las reservas hídricas. Sólo ha afectado en algunos desprendimientos en el camino del cementerio, que será limpiado durante el día de hoy, y los bomberos voluntarios de Morella tuvieron que realizar dos actuaciones puntuales que se resolvieron sin ningún problema. El sábado, la tormenta afectó a una vivienda de la calle Cofradía, donde los bomberos tuvieron que sacar agua de la misma. Ya el domingo, el cuerpo se desplazó hasta Ortells para rescatar a una persona que debido a la crecida del río Bergantes no podía cruzarlo para volver a casa.
Las importantes tormentas también han hecho que entren en servicio las nuevas mejoras de canalización que se están ejecutando en la alameda y en la zona de la Tejería, funcionando correctamente y evitando muchos de los problemas que ocasionaban anteriormente.
Respecto a los edificios públicos, presentaron problemas puntuales por filtraciones de agua, la Casa Ciurana, la Torre Beneito y el Centro Lúdico y Deportivo Jaume I. En el caso de este último, desde el ayuntamiento se tiene previsto que en las próximas semanas que esté listo el informe, solicitado al colegio de arquitectos, para reparar las deficiencias y exigir responsabilidades a la dirección de obra y construcción, y así poder ejecutar las actuaciones necesarias para evitar estos problemas que afectan a las instalaciones y a sus usuarios.
En cuanto al monumento más importante de la ciudad de Morella, el Castillo, no ha sufrido ningún desperfecto destacable, eso sí, las intensas lluvias, obligaron a cerrar al público en la jornada del sábado debido a las filtraciones y riesgo de desprendimientos que hacían imposible su visita. También, se tuvo que suspender ayer domingo, el derby comarcal de la primera regional que enfrentaba al Morella FC y al Deportivo Cinctorrà, ya que el estado del campo de la Fábrica de Giner imposibilitaba la práctica del fútbol.
Desde primera hora de esta mañana, la Policía Local y los trabajadores de la brigada municipal están trabajando para valorar todos los desperfectos ocurridos, proceder a la limpieza y reparación de los mismos. No hay previsiones de más precipitaciones en los próximos días, y como hemos comentado antes, estas lluvias han sido muy positivas para el campo y para el paisaje con la salida de ríos y barrancos, convirtiéndose en un atractivo turístico más para el puente.