El prestigioso juez de Granada llena el Teatro Payá y ofrece su experiencia y consejos sobre el origen de la delincuencia juvenil.
Castellón Información
Más de 500 personas han asistido esta mañana en el Teatro Payá de Burriana a la conferencia que, por espacio de dos horas y media, ha pronunciado el juez de menores de Granada Emilio Calatayud, conocido por su prestigio, trayectoria y sus sentencias aleccionadoras. Trabajadores de los servicios sociales, del sector de la enseñanza; de las policías locales de toda la provincia, así como el público en general se han dado cita para escuchar al ponente, quien ha abordado la génesis de la delincuencia juvenil y su relación con los cambios que la educación ha sufrido en España, a todos los niveles, en las últimas décadas.
El alcalde de Burriana, José Ramón Calpe, ha dado la bienvenida a todos -especialmente a los procedentes de otras localidades- y ha presentado a Emilio Calatayud, de quien ha destacado el hecho de que siga manteniendo la titularidad del Juzgado de Menores de Granada después de tantos años, "lo que demuestra su compromiso y vocación al respecto". El primer edil ha mostrado su satisfacción porque la Diputación de Castellón, organizadora de la conferencia, haya elegido Burriana y a los Salesianos como principales colaboradores, y ha destacado que, al igual que San Juan Bosco, "Emilio Calatayud demuestra una especial preocupación por los jóvenes, sobre todo para recuperar para la sociedad a los más problemáticos".
Por su parte, la vicepresidenta del área social de la Diputación y concejal en Burriana, Esther Pallardó, ha agradecido el compromiso y la labor de los Salesianos para que esta conferencia haya podido celebrarse y ha dado cuenta del trabajo con menores que realiza la institución provincial en aquellos municipios que carecen de servicio especializado para su atención, a través de la Red de Innovación y Calidad Social.
Emilio Calatayud ha defendido su condición de juez, padre y ciudadano; así como la necesidad de un pacto por el menor entre las principales fuerzas políticas. El magistrado, desde su experiencia, considera que muchos de los problemas que afrontan los menores con la Justicia tienen su origen en el ámbito familiar y la necesidad de que los padres, al igual que los profesores y otros funcionarios públicos, recuperen el concepto de autoridad, "distinto al autoritarismo", y que fijen límites a las conductas de los menores para evitar caer en su conocido decálogo para convertir a un joven en un delincuente.
Emilio Calatayud, que también ha contestado varias preguntas planteadas por el público, ha reivindicado un término medio en los cambios que ha sufrido la autoridad y la educación en las últimas décadas, evitando los extremos y encontrando un punto de equilibrio que perdure en el tiempo y no se preste a los vaivenes de la política.
Por último, el director de los Salesianos en Burriana, Fernando Miranda, ha felicitado al ponente y ha recordado que la educación es cosa de todos: "Es un trabajo en equipo de padres, educadores, legisladores, políticos y de toda la sociedad, que tienen que velar por los menores y acompañarlos tanto en los momentos fáciles como, sobre todo, en los difíciles. Es un proyecto compartido, donde debe primar el compromiso y la responsabilidad para sacar adelante personas desde la madurez y desde el corazón, pero fijando también límites. Hay algo que podemos hacer mejor y estamos convencidos que lo debemos hacer".
