Antonia García Valls. Portavoz del PSPV en el Ayuntamiento de la Vall d'Uixó.
Estamos ante un año electoral, en el que, menos elecciones europeas, vamos a votar nuevos gobiernos municipales, nuevos gobiernos autonómicos y nuevo gobierno central.
Y detecto que “algunos” están muy nerviosos y van pegando “puntadas” sin ningún tipo de rigor ni seriedad.
Lo estoy viendo en mi municipio, en el que, después de más de tres años de “desgobierno” de Clavell, después de expoliar los bolsillos de los valleros y valleras, sin que ello se tradujera en mejores servicios a la ciudadanía, ahora, al final de la legislatura nos quiere hacer ver que “hace” lo que no ha hecho antes.
Corriendo se ha puesto a asfaltar la ciudad. Después de más de dos años en que el Grupo Municipal Socialista presentamos una moción para que se articulara un Plan de Asfaltado, a largo plazo, desde la responsabilidad y la planificación.
El resultado ha sido el que estamos viendo las vecinas y vecinos de la Vall, a los que les asfaltan la calle y a los pocos días vuelven a “parchear” porque lo han hecho mal. Rematadamente mal.
Firman un papel, que no es una operación definitiva, para hacer creer a los jubilados y pensionistas que les harán el centro social más grande. Desde el partido socialista les decimos que dejen de vender humo, que dejen de prometer mentiras y que no creen falsas expectativas otra vez, porque llevan mintiendo en este tema desde 2007, ayudados, entonces por Fabra, (Carlos).
Se inventan premios ahora, al final de todo, sin planificación, sin previsión presupuestaria, a ver cuántas fotos más se hacen. Resultan patéticos.
Compran un local para el INSS para vender el “sustitutivo” del hospital que tanto prometieron los Fabra, Camps, Bonig y Clavell para ganar las elecciones y que ha resultado ser una mentira más del PP. Compran con todos los informes técnicos y económicos en contra. Rematadamente mal.
Porque no se puede gobernar una ciudad si no se quiere a la ciudad, no se puede gobernar una ciudad siendo oportunistas en vez de crear oportunidades para la gente. No se puede gobernar una ciudad “a salto de mata”, sin previsión, sin planificación, sin tener una visión de futuro para la Vall.
Clavell se ha caracterizado por anteponer sus propios intereses particulares y partidistas antes que los de la propia ciudad. Quizás todavía no se ha enterado de cuáles son estos intereses…
Por eso necesitamos el cambio de rumbo en nuestro municipio, aire fresco, con proyecto de presente y futuro para la Vall y no con la visión cortoplacista que ha caracterizado el gobierno municipal de Clavell.
