Clara Parra
El concejal de Urbanismo en el Ayuntamiento de Vila-real, Emili Obiol, ha confirmado a Castellóninformación el fin de las obras interiores de derribo de las antiguas dependencias judiciales de la localidad. Unos trabajos que arrancaron a principios de mes y han supuesto el desmantelamiento interior de la infraestructura con el objetivo de que esté preparada para cuando se proceda al derribo del edificio.
De esta manera, Obiol ha recordado que se cumplen los plazos anunciados por el equipo de gobierno y que tuvieron que ser modificados tras escuchar las peticiones de los vecinos de la zona quienes plantearon la posibilidad de trasladar los trabajos de desmantelamiento exterior a la época estival para minimizar los problemas en la zona y los comercios.
Una vez finalizada esta primera fase, el edil ha asegurado que el próximo equipo de gobierno tendrá que acometer las obras a mediados del mes de junio con el objetivo de tener lista la nueva plaza provisional, que surgirá de este derribo, para las fiestas patronales del mes de septiembre.
Estas obras cuentan con un presupuesto de 213.660 euros y supondrán sumar para la ciudad un nuevo espacio abierto hasta donde podrían trasladarse, según intenciones municipales, desde alguno de los mercadillos que realiza habitualmente la ciudad como la creación de nuevos, tal vez de flores como anuncio el alcalde, José Benlloch, así como para otro tipo de usos lúdicos.
Las previsiones del actual equipo de gobierno es concluir toda la reurbanización de la zona con una futura remodelación integral del mercado, que tal y como puntualizó recientemente el primer edil “seguirá siendo municipal y no privado”.