Noticias Castellón
viernes, 22 de noviembre de 2024 | Última actualización: 22:28

Opciones para gobernar

Tiempo de Lectura: 4 minutos, 45 segundos

Noticias Relacionadas

Miguel Bataller. Ciudadano del Mundo y Jubilado.

En tiempos preelectorales, suelen martillear nuestros oídos todo tipo de propuestas alternativas para explicarnos cual es el mejor, mas adecuado, o más democrático sistema

para poder formar un Gobierno al acabar los comicios.

Unos creemos que en todo caso es preferible permitir la gobernabilidad al partido más votado, para que asuma toda la responsabilidad, por ser menos costoso para los ciudadanos, al evitar el mercadeo de cargos públicos o de cargos de confianza  a cambio de incorporarse al Gobierno que se forme por la suma de opciones minoritarias, y de conjugar ideas, proyectos o intereses a veces contrapuestos, con su carga negativa.

Si para poder gobernar tienes que recurrir a los tripartitos u otros múltiplos superiores, siempre tendrás que multiplicar el número de “estómagos agradecidos” a vivir de los presupuestos ya sean municipales, autonómicos o nacionales.

Con la solución multipartidaria se multiplican los márgenes de error, ya que es prácticamente imposible articular una opción de Gobierno que permita incluir los programas de todos ellos y cumplir una mínima parte de los mismos.

Después de la última experiencia vivida en Cataluña con el tripartito de Montilla que resultó un fracaso monumental, tuve claro que queriendo contentar a todos acaban por quedar insatisfechos todos y prueba evidente de eso, es que en aquella época el PSOE (allí PSC) forzado por el independentismo de Esquerra Republicana, perdió su norte y estuvo al borde de la ruptura entre socialistas y se  inició su hundimiento electoral.

Pasarón de ser la primera fuerza en muchas elecciones a ser superado por dos y en estos momentos hasta por tres partidos (CiU, ERC y en estos momentos C´s ), e incluso IC-Els Verts que entró en la misma coalición camina hacia atrás, como los cangrejos desde aquel lamentable gobierno.

Solo hubo un ganador, que fue Esquerra Republicana cuyos criterios independentistas se impusieron al sentido común, y acabó creciendo y siendo el socio elegido por CiU en las siguientes elecciones.

De la misma forma que hundió al PSC-PSOE, deterioró en la siguiente legislatura a Mas&Co (el pujolismo corrupto) que ahora navega a la deriva viendo como día a día pierde apoyo popular CiU anclada en proyecto irracional independentista al que fue empujada por los de la izquierda republicana pensando que la Independencia  les podría servir a ellos para poder enterrar todos los delitos de su “padrino y ad lateres”.

Los manjares cocinados con tantas salsas y de tan diversos sabores acaban indigestándose a los comensales, y en este caso esos somos los españoles.

Frente a mi teoría y opinión y con tantos o mas argumentos que los expuestos por mi estoy oyendo últimamente la teoría de Albert Rivera, que se ha mantenido firme en Andalucía junto al PP y a Podemos y no se abstendrán de momento para investir a Susana Díaz como Presidenta de la Autonomía Andaluza, pese a ser de largo la lista mas votada, de no firmar ella por escrito las condiciones que él le impone en formato de un Pacto Anticorrupción sin excepciones, es decir aceptando su programa de Gobierno.

Me parece correcto y entiendo al joven abogado catalán, pero como entra en conflicto con mis propias convicciones (que conste que también me repugna cualquier tipo de corrupción) no puedo aceptar excepciones a mis propias reglas de juego.

A todos los políticos les debemos de juzgar todos los votantes de los ámbitos que se votan y si en Andalucía, Cataluña o Valencia los votantes somos ciegos o tontos tendremos los gobiernos que hayamos elegido por mayoría y los sufriremos por torpes o necios.

El mismo criterio me sirve para las municipales o para las generales.

Porque nadie garantiza que como he explicado antes, los Gobiernos de Coalición que se formen, gestionen mejor que los que se han votado por la mayor parte de los votantes y por lo tanto es mas fácil que se equivoquen con distintas soluciones todos los coaligados que aquellos que tienen unas posturas idénticas para solucionar problemas iguales.

Y a partir de ahí ya entra en juego la palabra mágica: la corrupción.

Y contra los corruptos si que tenemos que luchar todos a brazo partido para juzgarlos y encarcelarlos pero obligándoles a devolver todo lo robado mas las multas pertinentes,  desposeyéndoles de sus derechos ciudadanos para volver a ejercer en la vida pública.

El problema es que durante demasiados años, demasiados políticos que han ejercido responsabilidades de Gobierno tanto en el Estado como en Autonomías y Municipios han resultado ser unos inmorales cuando no ladrones de tomo y lomo y eso no ha sido algo excepcional o limitado a la derecha o a la izquierda o a nacionalistas e independentistas, sino que todos tienen a demasiados pecadores y pecados que ocultar y por eso los votantes nos hemos vuelto escépticos respecto a nuestros representantes hasta hoy y procuramos creer a los que prometen cambios radicales con una dialéctica mas o menos agresiva.

El problema es que estos señores son también españoles y de carne y hueso como los anteriores y aparecen con las mismas ilusiones y proyectos que los anteriores.

Acabo por pensar que en los  edificios de las Instituciones del Estado, hay enquistado en el medio ambiente un virus indetectable que acaba atacándoles a demasiados de ellos que no se han vacunado antes de entrar en ellos: el virus de la corrupción.