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La concejala de Hacienda, Cristina Rius, ha informado hoy en la Comisión municipal de Hacienda a todos los grupos de la Corporación de la nueva situación catastral del suelo urbanizable con ordenación o sin ordenación detallada en el término de Borriana.
De este modo, el Parque Empresarial, situado en la carretera de Vila-real, después de más de una década de pagar IBI urbano, este año estos propietarios pasarán a pagar IBI rústico. Este cambio se realiza al ser estos terrenos urbanizables pero sin ordenación. La concejala de Hacienda ha destacado que con esto se cumple una reivindicación que llevaban haciendo hace tiempo los propietarios de estos terrenos.
Por otro lado, la concejala de Hacienda ha explicado que 3 sectores situados, paralelos a la CV 18, además del sector Llombai-Monges, estos 4, a criterio de catastro, disminuirán su valor catastral, según unos módulos establecidos por el mismo catastro. Según la regidora, actualmente están valorados entre 13 y 23 euros el metro cuadrado y pasarán a un valor entre 2,40 euros y 5,41 euros el metro cuadrado. Cristina Rius ha remarcado que con este cambio, los propietarios reducirán sustancialmente los impuestos que pagan . La concejala considera justo que siendo que los terrenos están destinados a la explotación agraria, se rebaje de manera considerable a efectos catastrales. En cualquier caso, será conservando la calificación de terrenos urbanos.
A pesar de todo esto, el sector más perjudicado en el tema de la tributación es el del PAI Sector Sant Gregori que desde la ponencia de valores del 2012 está tributando como zona urbana con valores excesivamente elevados. Según la concejala, la demora en la tramitación del PAI Sant Gregori y todas las incidencias que han retrasado todavía más el desarrollo del PAI, justifica una reducción de la presión fiscal que están sufriendo estos propietarios. Por eso, el Equipo de Gobierno, después de reunirse con responsables del Catastro, ha adoptado la decisión de solicitar una nueva ponencia de valores a la baja de estos terrenos que tendrá efectos teóricamente a partir del 2016. Si debido a cualquier circunstancia la gerencia de catastro no hiciera efectiva la nueva ponencia de valores durante el 2016, siempre quedaría la posibilidad de bonificar estos tributos según regulan las ordenanzas fiscales municipales.
Una vez se hará la solicitud, el Equipo de Gobierno, de manera prudente, tendrá en cuenta esa reducción de ingresos en el presupuesto. La concejala afirma que “aunque pensamos que los impuestos son necesarios para tener servicios de calidad, también consideramos que los propietarios no tienen que pagar más de lo que les corresponde”.
