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Los cinco rectores de las universidades públicas valencianas: Esteban Morcillo, de la Universitat de València Estudi General; Francisco Mora, de la Universitat Politècnica de València; Manuel Palomar, de la Universitat d'Alacant; Jesús Tadeo Pastor, de la Universidad Miguel Hernández de Elche y Vicent Climent, de la Universitat Jaume I de Castelló, han participado en una mesa redonda organizada por la Real Sociedad Económica de Amigos del País de Valencia (RSEAPV) bajo el título 'El valor social de las universidades'. Vicent Cebolla, director de la RSEAPV, ha sido el encargado de moderar esta mesa que se ha celebrado en el Conservatorio Profesional de Música de Valencia.
En su intervención, el rector de la Universitat Jaume I ha analizado el impacto de la educación superior en la sociedad y ha destacado la correlación significativa entre la capacidad de una sociedad de formar a sus miembros y las posibilidades de estos de generar riqueza y progreso. "En este contexto en el que nos encontramos, ahora más que nunca la verdadera riqueza de las naciones son sus recursos humanos, su ciudadanía. El progreso de un país, de una sociedad, depende de su capacidad de formar –y de formar de la mejor manera posible- a su población. Es el conocimiento, y por lo tanto la formación, el principal vector que determina las posibilidades de progreso –y no sólo económico- de los pueblos" ha señalado.
Vicent Climent ha recordado que en cuanto a la oferta vinculada a la población en edad de cursar estudios superiores, España está 4 puntos por bajo de la media de la Unión Europea y 6 puntos por bajo de la media de la OCDE. "Cuando a veces se dice, con una total inconsciencia, que en España hay muchas universidades y muchos estudiantes universitarios, habría que recordar que la tasa de acceso a los estudios superiores es del 52% sobre el total de la población en edad de ingreso, mientras que en el Reino Unido esta tasa se eleva al 67% y en los Estados Unidos al 71% de sus poblaciones. Estos datos nos tendrían que hacer reflexionar muy seriamente como país sobre qué estamos haciendo y qué queremos para nuestro futuro" ha manifestado el rector.
En su análisis, el rector de la UJI también ha hecho referencia al impacto positivo que tiene la formación universitaria en la ocupación. Según los datos del EPA al cierre del año pasado, la tasa de paro en el conjunto de la sociedad española es del 23,7% de la población, un porcentaje que se reduce al 14,2% de la población con estudios universitarios y al 4,2% de la población con doctorado. "Cuando muchas veces se dice que la universidad es una fábrica de parados, más bien tendríamos que decir que la Universidad es el único escudo realmente efectivo ante la lacra de la desocupación, la única garantía que tienen los individuos para huir de este drama social y personal" ha destacado Climent.
Por último, Climent ha defendido tanto la formación en valores para formar mejores ciudadanos como la formación a lo largo de la vida como desarrollo permanente que tiene que acompañar el proceso vital de cualquier ser humano. "Aquello que se aprende durante la etapa universitaria no es mochila suficiente para poder transitar por el mundo profesional durante toda la vida laboral, sino que más bien es un tipo de bagaje de base que tiene que ir creciendo y alimentándose de los nuevos avances en cada uno de los campos del conocimiento" ha apuntado. "En este campo las universidades, y de manera muy especial las universidades públicas valencianas, llevamos años trabajando para desarrollar una oferta capaz de satisfacer las necesidades de actualización continúa que nos exige el tiempo actual" ha añadido Climent.
